Foto: Edu Botella/ Europa Press.MURCIA. La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Murcia ha afirmado este miércoles que el incremento de los precios de productos alimentarios abonados por los consumidores no han supuesto más renta para agricultores y ganaderos, quienes han tenido que afrontar "fuertes incrementos de costes y caídas de producción por la meteorología", según han informado fuentes de la organización en un comunicado.
En una valoración sobre el transcurso del año agrario cuando se cumplen los dos primeros cuatrimestres, UPA-Murcia ha señalado que la escalada de precios iniciada en la segunda mitad de 2021 "se ha incrementado exponencialmente" este año, sobre todo a partir del conflicto bélico en Ucrania, y ha hecho que carburantes y electricidad alcancen "precios desconocidos hasta la fecha".
Todo ello ha provocado "una subida generalizada de los costes de producción que soportan agricultores y ganaderos", según ha explicado UPA.
"Aún reconociendo que las medidas adoptadas por el Gobierno de España han amortiguado en parte los costes de electricidad y carburantes, los precios que pagan hoy agricultores y ganaderos son notablemente más altos, hasta el doble por el gasoil agrícola y el triple por la electricidad", ha declarado Marcos Alarcón, secretario general de UPA Murcia.
En este sentido, Alarcón ha reconocido que el "esfuerzo presupuestario realizado por el Gobierno de España" para conceder ayudas directas, dirigidas fundamentalmente a los sectores ganaderos, "no impide señalar que en la mayoría de los casos solo han servido para compensar el sobrecoste de pienso de un mes".
Además, el representante de UPA ha lamentado que el Gobierno regional "no haya realizado un mínimo esfuerzo para complementar las medidas estatales o apoyar a los sectores no incluidos en ellas".
UPA Murcia se ha congratulado de que la disponibilidad de agua "no haya sido un factor limitante para la actividad agrícola", a pesar de estar condicionada por "su alto coste", si bien ha destacado la "incertidumbre" tanto para regadíos dependientes del trasvase Tajo-Segura, como de la Cuenca del Segura, por los efectos del periodo de sequía.
Ante ello, la organización agraria ha señalado que "la posibilidad de trasvasar agua dependa solo de las existencias en cabecera del Tajo y no de nuevas normas que los reduzcan de forma injustificada resulta esencial de cara a la aprobación de los nuevos Planes de cuenca que se producirá antes de que finalice el año".
También ha abogado por extender los apoyos al precio del agua desalada para el regadío, ya que son "indispensables para la viabilidad de las explotaciones agrarias familiares profesionales y los pequeños y medianos agricultores".
Respecto a la campaña de la fruta de hueso, la evaluación de UPA-Murcia indica que se mantiene la reducción de superficie regional dedicada a este cultivo, que se sitúa en 22.100 hectáreas --13% menos que en 2017--, en línea con el descenso de superficie en el resto del país (-10%).
Las primeras liquidaciones a los agricultores apuntan a una "ligera" subida de precios, que "no compensa el incremento de costes y la caída de producción por hectárea, por lo que se reduce el margen de renta de muchos productores que, en algunos casos, suponen pérdidas en esta campaña".
En hortalizas se mantuvo un desarrollo "aceptable" de la campaña hasta febrero y marzo de 2022, pero a partir de entonces "se dispararon aún más" los costes de producción y los efectos de las lluvias afectaron a la calidad de las producciones, lo que provocó un "mal final" de campaña de otoño-invierno.
UPA Murcia ha recordado que en estos momentos se están iniciando las plantaciones para la próxima campaña con "fuertes incertidumbres" debido a los elevados costes de producción y la disponibilidad de agua para el próximo año hidrológico, dado que los cultivos se concentran especialmente en zonas regables del Tajo-Segura.
La campaña del melón y la sandía tuvo un inicio "tardío" debido a las lluvias de primavera, que provocaron la pérdida y posterior replantación de un número importante de plantaciones y caídas de producción por hectáreas.
Como consecuencia, la campaña arrancó con escasez de producto para abastecer a los mercados y un incremento de precios, aunque no fue "desorbitado". Así, en junio los precios de salida de central hortofrutícola se situaron sobre los 0,5 euros por kilo, produciéndose una caída de precios en julio al incorporarse al mercado la producción de Castilla-La Mancha, remontando nuevamente en agosto, aunque en un momento de bajas producciones.
Si bien los precios por kilo al agricultor serán superiores a los del año pasado, la renta por explotación ha caído "en picado" como consecuencia del incremento de costes y la disminución de rendimientos por hectárea, ha explicado UPA Murcia.
En cuanto a la uva de vinificación, en estos momentos se inicia la vendimia, fundamentalmente con las uvas blancas. Se espera una uva de gran calidad, aunque con caídas de producción en torno al 20%, consecuencia de la falta de lluvias en los últimos meses, al igual que en el resto de zonas productoras.
UPA ha recomendado a las bodegas la utilización del contrato-tipo homologado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para la compra de uva para vinificación.
Las heladas de inicio de año y las enfermedades fúngicas derivadas de las lluvias posteriores (con picos de hasta 900 litros por metro cuadrado en alguna zona productora) han provocado una reducción de la producción de frutos secos estimada en un 50% respecto al potencial productivo. En estos momentos se inicia la recolección sin cotizaciones de precios.
La campaña del limón se ha desarrollado "de forma complicada" y los precios percibidos por los productores "no han estado en consonancia con la producción existente en España". En el arranque de la campaña coincidieron restos de envíos de países terceros con el inicio de la recolección de limón Fino, lo que provocó precios bajos que no se correspondían con la producción.
A partir de diciembre se produjo una reactivación de los mercados de exportación para limón español y un incremento de las recolecciones, pero en estas fechas "la campaña de Fino ya estaba hundida".
La campaña de limón Verna, por su parte, mantuvo en primavera cotizaciones superiores, pero fue corta debido al descenso de producción.
UPA Murcia ha reclamado, de cara a la campaña 2022-2023, que se inicia próximamente con una caída de producción según las estimaciones de cosecha, la aplicación del principio de reciprocidad en las relaciones entre la Unión Europea y terceros países, un incremento de controles en frontera y la obligatoriedad de tratamientos en frío para las entradas de producción procedente de países terceros con riesgo sanitario.
Por su parte, los sectores ganaderos han sido, según UPA, "los grandes perjudicados del escenario internacional que estamos atravesando, ya que vienen soportando ininterrumpidamente los incrementos de costes de electricidad y combustibles de los que son muy dependientes y los altos precios de cereales y piensos".
La mayoría de los ganaderos encuentran instalados en una espiral de pérdidas económicas, siendo urgente que se produzca inmediatamente un incremento de los precios que perciben por sus producciones.
Además, UPA Murcia ha alertado de que se están produciendo los primeros casos de cierre de explotaciones derivados de la crisis. "Especialmente paradigmática" ha considerado la situación de los avicultores de la Región, que han visto como en las últimas semanas se ha incrementado el precio de la carne de pollo en los puntos de venta sin que las integradoras hayan revisado al alza la compensación.
