MURCIA (EFE). Un año después del gran cambio político que hubo en Murcia, el socio clave de la operación para desalojar al PP, Podemos, se siente "defraudado". El grupo municipal morado en el Ayuntamiento ha asegurado este viernes, cuando se cumple un año de la aprobación de la moción de censura en el consistorio, que se siente "defraudado" con el nuevo equipo de Gobierno, al que apoyó, porque no ha impulsado ni un modelo de municipio ni los acuerdos pactados en el partido morado.
El portavoz municipal del partido, Ginés Ruiz, acompañado por la concejala Clara Martínez Baeza, ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha asegurado que no se arrepiente de haber apoyado la moción de censura y que lo volvería hacer, puesto que el Gobierno de PP y Ciudadanos "estaba roto" y perdido en sus peleas internas, además de impulsar políticas con las que el partido no está de acuerdo.
Sin embargo, ha advertido de que no está "en absoluto" satisfecho con las medidas tomadas en el año que ha transcurrido, que se resumen, ha ironizado, en que "si abres el grifo, sale agua".
Según ha lamentado, el Gobierno de PSOE y Cs surgido de la moción solo ha gestionado aquellos asuntos que "funcionan por inercia", pero no ha sido capaz de poner sobre la mesa un "modelo de municipio que dé sentido y lógica" a ese cambio de gobierno.
Tampoco se han puesto en marcha la inmensa mayoría de los compromisos adquiridos con la formación morada para apoyar la moción de censura y para sacar adelante los presupuestos de 2022, como el impulso del transporte público, la creación de "supermanzanas" para avanzar en el calmado de tráfico, la puesta en marcha de un centro de atención temprana de titularidad pública, el impulso de modelos de ocio alternativo, o la mejorar de la climatización y sombrajes en colegios o su apertura por las tardes.
Se trata, ha insistido Ruiz, de proyectos de bajo coste económico y gran impacto social que no se han materializado ni se ha explicado por qué.
Esta ausencia de modelo, ha lamentado, está también lastrando la elaboración del presupuesto municipal de 2022, que fue una exigencia clara del partido para apoyar y sacar adelante los de 2021.
Podemos exigió que las cuentas de este año se aprobasen entre diciembre de 2021 y enero de 2022, pero a día de hoy, a finales de marzo, aún no hay noticias de las cuentas, algo que ha criticado duramente.
"No puede ser que el grupo minoritario, el que está fuera del gobierno, sea el único consciente de la necesidad que tiene el municipio de tener un presupuesto y no seguir con las cuentas prorrogadas", ha criticado, y ha señalado que su grupo no parte de "exigencias maximalistas", pero ha advertido de que es momento de priorizar políticas y líneas de trabajo para sacar adelante las cuentas.
Estas advertencias, ha dicho, no son "una amenaza de ruptura", pero sí "un toque de atención serio" a la coalición de gobierno, a cuyo lado estará Podemos "si van a poner por delante las necesidades de los vecinos, si no, no, porque no tiene sentido". "Si no cumplen, para qué vamos a estar", ha resumido.
Por último, ha lamentado que, si el gobierno surgido de la moción no demuestra que "otro modelo de hacer gestión es posible", eso tendrá un "altísimo coste de oportunidad" para todo el municipio, y ha insistido en que "es cuestión de voluntad política" cumplir con los acuerdos y compromisos que tenían con los morados. EFE