MURCIA. Hubo un tiempo en el que convivieron una España en color, que se vendía al exterior con hitos como la apertura del aeropuerto de Barajas y las bases militares estadounidenses, el asfaltado de carreteras o la llegada de turistas y artistas de Hollywood; y una España en blanco, en la que aún existían campos de concentración, represaliados o exiliados en Rusia. Este contraste entre lo que se mostraba y lo que se era realmente está en el trasfondo de la novela negra Solo ante el pasado, del autor y guardia civil murciano Antonio Miguel Cascales García. Es, además, la primera de sus siete obras publicadas que firma con su verdadero nombre y no con el pseudónimo Antonio Marchal Sabater. "En algún momento tenía que salir a la luz mi nombre, que en un momento decidí ocultar para protegerme a mí y a mi familia debido a mi profesión", explica.
Así, ya como Antonio Miguel Cascales García, el guardia civil -que ha vuelto a su ciudad natal al final de su trayectoria profesional, tras pasar por diferentes destinos- cuenta una historia ambientada en los años 50, cuando una chica americana -que llega a España con una compañía de artistas de Hollywood- le encarga a un detective la búsqueda de su hermano, un brigadista desaparecido durante la Guerra Civil. De esta premisa parte "el viaje a través de la historia" que propone el autor, quien da a conocer en esta obra ,"cómo fueron los primeros años del aperturismo, con la llegada del turismo y otros cambios que se confirmaron en los 60".
Antonio Miguel Cascales también señala que antes de abordar cualquiera de sus novelas, se documenta en profundidad, hasta en la moda del momento, para que la historia sea lo más real posible. En este caso, además, aunque se desarrolla principalmente en Madrid, la búsqueda del brigadista lleva al detective a viajar a Barcelona, el sur de Francia, Tánger y hasta la mismísima Cartagena.
Antonio Miguel Cascales García nació en Murcia el 6 de agosto de 1964. En los años ochenta, ingresó en las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado e, inmediatamente, fue asignado a la lucha antiterrorista dentro de los servicios de información del Estado, hecho que le llevó a ser testigo de numerosos acontecimientos de la transición en diferentes lugares de la geografía española: País Vasco, Cataluña o Madrid.
En algunas de sus novelas, refleja parte de ese pasado adaptándolo a la trama. Cuenta con varios premios literarios, como el del certamen de microcrímenes de Falsaria 2012; segundo premio de relatos cortos organizado por el Ayuntamiento de Lorquí , dentro de la celebración de la II Semana Cultural 2013; y el Premio del Público del X Certamen de Narrativa Breve 2014 de la Asociación Canal Literatura. Otras de sus novelas son El valle de las tormentas; Bajo la Cruz de Lorena; Oiz 1985; La sombra de la sospecha; Dasha; y Epitafio para un extraño.