CARTAGENA. La empresa Solbikes ha pedido licencia de actividad a la concejalía de Urbanismo para poner en marcha la planta fotovoltaica que tiene proyectada en La Aljorra, en el paraje El Saladillo, y por la que recibía el pasado mes de diciembre el visto bueno del informe de impacto ambiental desde la Dirección General de Medio Ambiente. En los próximos días -un total de diez- el expediente de licencia de actividad se somete a información pública a fin cualquier interesado pueda examinar y formular las alegaciones u observaciones que estime procedentes en defensa de los derechos que puedan verse afectados.
El proyecto inicial evaluado consiste en una instalación solar fotovoltaica para conexión a red de potencia 31’5 MWp. Tras las modificaciones, la superficie de todas las referencias catastrales válidas para la planta solar fotovoltaica es de 411.737 metros cuadrados (anteriormente 848.012 metros cuadrados), si bien la superficie total dentro del vallado perimetral de las parcelas donde se implantarán las instalaciones es finalmente de 334.432 metros cuadrados.
La inversión ronda los 9 millones de euros -cifras no oficiales- aunque más de la mitad de todo ese dinero corresponde a la infraestructura.
La propuesta inicial de implantación fue modificada cumpliendo las recomendaciones de la Subdirección General de Política Forestal, Caza y Pesca Fluvial, emitidas durante la fase de consultas, dado que parte de la planta solar se situaba sobre terreno de naturaleza forestal de conformidad con la Ley de Montes, por lo que el promotor retiró 17 seguidores de las zonas forestales.
La actuación contempla la ejecución de las siguientes obras: Instalación solar fotovoltaica para conexión a red de potencia 31,50 MWp; proyecto de l.s.a.t 66kv para evacuación de energía eléctrica producida en planta solar FV a subestación de cesión e instalación de nueva subestación eléctrica de cliente 30/66 kV.
A finales de junio de 2021 Solbikes se encuentra con el rechazo social causado por el proyecto que iba a ir instalado en Canteras, así como de la moción presentada al pleno municipal sobre “Plantas fotovoltaicas en el Campo de Cartagena”. Los vecinos y algunos partidos políticos se posicionaron en contra, alegando que el grave daño al impacto paisajístico que esta instalación ocasionaría, en forma de tala de árboles y eliminación general de flora autóctona. También por su impacto visual.
De esta manera, previendo que pudiera provocar una moratoria "indeseable" para la empresa que pudiera incluso afectar a otros proyectos Solbikes decidió "desistir" del proyecto, para reconducir su ejecución a una ubicación alternativa, y sin afecciones, de tal forma que dicha decisión no perjudique la viabilidad de la empresa ni de sus trabajadores.