CARTAGENA. San Javier reúne todos los atractivos necesarios para que el visitante y el turista disfrute de un sinfín de opciones a cuál de ellas más atractiva. San Javier es sostenible, accesible e innovador: un destino que no deja indiferente a nadie, repleto de experiencias y de tradiciones.
El municipio se distingue por la calidad y variedad de sus arenales. Gracias a poder disfrutar con dos mares, algo de los que muy pocos pueden presumir, tiene playas para todos los gustos.
En sus dos mares, por un lado, el Mar Menor que baña el litoral de Santiago de la Ribera y una buena parte del cordón-istmo de la Manga del Mar Menor y el Mediterráneo en la otra orilla de la Manga, encontramos características muy distintas en cuanto a temperatura, salinidad y oleaje. El hecho de contar con estos dos mares nos permite elegir un tipo de baño en función a nuestros gustos, y a los amantes del deporte náutico, optar por practicar actividades en cualquier época del año tan diversas como vela, kayak, kite surf o piragüismo; todas ellas ofrecidas por las empresas de turismo activo del municipio, adheridas a la Estación Náutica del Mar Menor-Cabo de Palos. El buceo cobra especial relevancia, gracias a los fondos marinos de Isla Grosa y el Farallón, que gracias a ser Zonas Especiales de Conservación, se ha creado uno de los espacios marinos con mayor protección de España, donde se puede bucear bajo autorización.
El clima con el que cuenta este municipio permite disfrutar de baños y paseos por sus playas no solo en primavera y verano; también el otoño e invierno invita a sus habitantes y turistas a gozar de sus aguas cálidas, contemplar sus paisajes y atardeceres, así como practicar actividades como pedalear por el tramo de la Eurovelo 8, realizar senderismo por el GR92 o jugar al golf en un campo de 18 hoyos junto al mar.
La gastronomía local está basada en los pescados y las verduras y frutas de su huerta. Langostinos del Mar Menor, el arroz caldero, el mújol o dorada a la sal, las huevas de pescado en salazón y su rico Pastel de Cierva, son algunas de las delicias que se pueden degustar en cualquiera de los establecimientos hosteleros que nos ofrece el municipio: riqueza gastronómica de primer nivel. Es en este municipio donde podemos encontrar las Encañizadas, un sistema de pesca artesanal, originado en época árabe, que consiste en colocar cañas formando laberintos circulares.
La aeronáutica merece un capítulo aparte y casi exclusivo. En San Javier se creó la primera base aeronaval de España. No se entiende San Javier sin la Academia General del Aire. Hace algo más de 100 años, bajo la denominación de Escuela Elemental de Pilotos se iniciaron los primeros cursos de vuelo y posteriormente en 1943 se fundó la actual academia, además de tener presencia la Patrulla Águila convertida en un referente mundial de vuelo acrobático. Todo ello ha hecho posible la puesta en marcha del museo Aeronáutico Tiflológico y el Festival Aéreo, cita inevitable en mayo.
Las noches de verano en San Javier no se entienden desde hace 24 veranos sin este Festival Internacional de Jazz. Surgió en el año 1998, consiguiendo la Declaración de Interés Turístico Nacional en 2018. La calidad de sus participantes lo ha convertido en una cita ineludible.
Junto a la aviación, el teatro es otro de los grandes rasgos identitarios del municipio. El festival se ha convertido en un punto de encuentro obligado para aquellos aficionados a estas disciplinas cada mes de agosto en el Auditorio del Parque Almansa.
Fan Futura Fest es, por su parte, el único festival de música de España cuyas actividades paralelas se centran en la divulgación científica en materia de sostenibilidad. La programación de artistas de nueva generación se completa con acciones de concienciación medioambiental.
Si hablamos de teatro y danza, el espectáculo Don Tenorio es la referencia. Ostenta el Premio Nacional a la Mejor Actividad Cultural en un cementerio que otorga la revista "Adiós Cultural", consta de dos partes. La primera parte comienza una procesión por la pinada del camposanto.
El recorrido por el cementerio acaba en el exterior del camposanto, donde el Grupo de Teatro San Javier representa la obra. Más de mil espectadores han podido disfrutar de esta escenografía, que moviliza a más de 200 vecinos de San Javier que participan en un espectáculo que supera los límites del escenario teatral y se convierte en un rito espiritual: una experiencia única tanto cultural como turística.