CARTAGENA. Llega enero y las fiestas de San Antón, la bendición de los animales, los rollitos y su pulpo. Es una de las grandes atracciones de las fiestas, el pulpo que sirven los bares en unas barras que sacan a la calle, preparado sobre unas grandes planchas. El pulpo que se vende en Cartagena es un pulpo pequeño, de roqueo. Suele estar entre el kilo y medio y los dos kilos, fresco.
Esta semana se ha celebrado unas jornadas de exaltación del pulpo en el restaurante El Paso de los Elefantes, con el propietario del establecimiento, Fran Garnero, como anfitrión y Tomás Martínez Pagán de maestro de ceremonias. Cinco expertos en la elaboración de este manjar cocinaron hasta en la elaboración hasta 75 kilogramos de pulpo y mostraron las excelencias de este cefalópodo que hizo las delicias a más de 150 invitados al evento, entre ellos la Alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo y varios miembros del equipo de Gobierno, el diputado regional del PP, Santiago López Noguera; la rectora Beatriz Miguel; representantes de los partidos del Consistorio; el director general de la Autoridad Portuaria, José María Gómez Fuster, el Almirante del Arsenal de Cartagena Pedro Luis de la Puente García-Ganges, además de empresarios, miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, judiciales, presidentes de cerca de cuarenta asociaciones, hosteleros, empresarios, artistas, pintores, cronistas, deportistas, etc…
Qué mejor momento que éste para reivindicar tradiciones y gastronomía en un barrio tan emblemático y castizo como el de San Antón y, evitar, de esta manera, que la receta del pulpo quede en el olvido.