MURCIA. El 15 de septiembre se celebra en toda Europa el Día de la Salud Prostática, una fecha que tiene como principal objetivo informar a la población y motivar a los varones a realizarse pruebas periódicas para detectar patologías en este órgano, entre ellas el cáncer de próstata.
¿Para qué sirve la próstata?
La próstata es una glándula situada entre la vejiga y el suelo pélvico del varón, justo delante del recto, que ejerce funciones relacionadas con la fertilidad (es la encargada, junto con los testículos y las vesículas seminales, de producir semen) y con el control de la micción (dada su situación anatómica entre el cuello de la vejiga y el esfínter estriado externo, conecta la vejiga con el exterior a través del pene, permitiendo evacuar la orina).
Con el paso de los años, el tamaño de la próstata cambia: en los hombres jóvenes tiene el tamaño de una nuez, pero, con el paso del tiempo, puede adquirir un volumen mayor.
En estos casos, la próstata comprime la uretra generando dificultad para orinar, aumento de frecuencia y urgencia miccional, sensación de vaciado incompleto e incontinencia urinaria.
¿Cuáles son los trastornos prostáticos más frecuentes?
El aumento del tamaño de la próstata se relaciona habitualmente con:
- Hiperplasia Benigna de Próstata (HBP).
- Cáncer de próstata.
Según explica el Dr. Antonio Romero, urólogo del hospital Quirónsalud Murcia, la Hiperplasia Benigna de Próstata (HBP) es una patología benigna que suele afectar a hombres a partir de los 40-45 años.
"Básicamente, se trata de un aumento en el tamaño de la glándula prostática que provoca dificultad en el paso de la orina por la uretra. Sus síntomas son dificultad para orinar, chorro miccional flojo y sensación de no vaciar completamente la vejiga tras la micción".
En el caso del cáncer de próstata, hablamos de un tumor maligno que se desarrolla en la próstata y que suele afectar a hombres a partir de los 45 años.
Según el especialista de Quirónsalud Murcia, la evolución de esta enfermedad suele ser bastante lenta y, en la mayoría de los casos, no se manifiesta con síntomas. Por eso, muchos pacientes no tienen ninguna molestia en el momento del diagnóstico.
"Gracias a los controles prostáticos periódicos, en el momento del diagnóstico el tumor suele estar localizado en la próstata, por lo que el tratamiento puede alcanzar niveles de curación muy altos".
Por otra parte, el Dr. Antonio Romero incide en que los trastornos prostáticos engloban también otras patologías de tipo infeccioso o inflamatorio como la prostatitis. Por eso, el perfil del paciente prostático es muy diverso e incluye a varones de todas las edades.
Cirugía láser o laparoscopia: ¿cuál es el mejor abordaje para el cáncer de próstata?
La cirugía láser ha supuesto un gran avance en el tratamiento quirúrgico de la hipertrofia prostática benigna en los hospitales Quirónsalud.
La técnica se realiza a través de la uretra, mediante un endoscopio con una cámara de visión que trasmite la imagen a una pantalla.
Tal y como nos explica el Dr. Antonio Romero, existen varios tipos de láser para realizar esta intervención, aunque todos tienen la finalidad de reducir o extirpar el tejido prostático para favorecer la micción.
"La indicación del tipo de láser se realizan en función de las características de la próstata: en próstatas de gran tamaño, el láser de holmio ofrece grandes ventajas respecto a la cirugía clásica con incisión abdominal, pues elimina completamente el componente obstructor al extirpar todo el tejido prostático".
Algunas de las ventajas de utilizar el láser como tratamiento para mejorar las patologías relacionadas con la salud prostática son:
- Reducción del riesgo de hemorragias (sobre todo en pacientes que toman tratamientos con antiagregantes o anticoagulantes).
- Disminución de la estancia hospitalaria (la cirugía láser puede realizarse en algunos casos de manera ambulatoria).
- Menor tiempo de utilización de sonda urinaria tras la cirugía.
- Reincorporación del paciente a la vida laboral o actividad habitual más rápida.
Respecto a la cirugía por laparoscopia, ha alcanzado un nivel muy elevado en la urología española.
La técnica consiste en realizar varias incisiones en el abdomen del paciente a través de las cuales, mediante pinzas especiales y una cámara, los médicos pueden realizar operaciones en diferentes órganos.
La cirugía por laparoscopia suele ser la técnica elegida para el abordaje de los tumores en la próstata junto con la clásica cirugía abierta.
"La cirugía robótica también se está utilizando en numerosos centros hospitalarios de España para el tratamiento quirúrgico del cáncer de próstata", explica el Dr. Antonio Romero de Quirónsalud Murcia. "Esta técnica aporta algunas ventajas, sobre todo en la calidad de la visión de las estructuras anatómicas. Sin embargo, requiere una infraestructura técnica especial y formación muy específica por parte del equipo médico".
Cómo mejorar la salud de próstata: ¿se puede prevenir el cáncer de próstata?
Prevenir el cáncer de próstata es complicado, ya que muchas veces su origen está relacionado con factores que no podemos modificar como la edad (más del 80 % de los casos de cáncer de próstata se diagnostican en hombres de 65 años o más), el origen étnico (los hombres de raza negra presentan mayor riesgo de cáncer de próstata que los de raza blanca) o los antecedentes familiares (el cáncer de próstata que podríamos denominar “familiar” ocurre aproximadamente en un 20% de los casos).
En todo caso, los factores ambientales o el estilo de vida también son claves para el cuidado de la salud prostática. Y, junto con las revisiones periódicas, son fundamentales para facilitar el diagnóstico del cáncer de próstata.
El principal consejos para mantener una buena salud prostático es llevar una vida saludable, adoptando hábitos como:
- Controlar y reducir el consumo de alimentos ricos en grasa animal.
- Llevar una dieta rica en verduras, frutas y legumbres.
- No fumar y limitar el consumo de café, alcohol o alimentos picantes.
- Mantener una buena hidratación, bebiendo agua de forma regular en función de la actividad física.
- Realizar ejercicio físico acorde con la situación general de salud.
Cáncer de próstata: tratamiento tras el diagnóstico
En sus primeras fases, los síntomas del cáncer de próstata son prácticamente inexistentes. Por eso, su presencia muchas veces se detecta "con pruebas habituales, como las analíticas de orina rutinarias".
El diagnóstico se realiza tras la determinación en sangre de una prueba que se conoce como PSA (Antígeno Prostático Específico).
"Sin embargo, y aunque la probabilidad de tener cáncer de próstata aumenta a medida que el PSA sube, no existe un nivel que indique con certeza la presencia de cáncer de próstata. Por ejemplo, con niveles superiores a 10 ng/ml existe un 50% de probabilidades de tener un cáncer de próstata, aunque los tumores pueden estar presentes con valores inferiores. Por eso, el diagnóstico certero de la enfermedad se realiza mediante una biopsia que consiste en extraer, con una aguja fina, unos fragmentos de la próstata a través del recto para poder analizarlos en el microscopio y establecer un diagnóstico correcto en función de las características histológicas del tumor".
Una vez diagnosticado el cáncer de próstata, su tratamiento es diferente en función de cada tumor y cada paciente.
"Cuando se diagnostica de cáncer de próstata se inician una serie de pruebas para saber si el tumor se encuentra localizado solo en la próstata (organoconfinado) o si, por el contrario, ha originado enfermedad extraprostática porque ha invadido ganglios linfáticos o ha producido metástasis en otros órganos".
Si el cáncer está localizado en la próstata, el tratamiento tiene intención curativa, y el objetivo es extirpar todo el tumor, junto con la próstata y su cápsula, mediante cirugía radical por laparoscopia.
"En estos casos la cirugía ofrece una tasa de curación que puede llegar al 90%", explica el Dr. Romero.
El tratamiento mediante radioterapia suele recomendarse únicamente cuando el tumor se encuentra localizado en la próstata o en tumores de bajo grado, y se pueden obtener resultados equivalentes a los de la cirugía radical.
"La braquiterapia es otra técnica que consigue buenos resultados en pacientes con tumor de próstata limitado y de bajo grado", explica el Dr. Romero.
En otras ocasiones, prosigue el urólogo de Quirónsalud Murcia, la radioterapia puede recomendarse cuando se sospecha que la enfermedad se ha extendido fuera de la glándula prostática.
¿Cuál es la tasa de supervivencia a este tipo de cáncer?
El cáncer de próstata tiene una mortalidad más baja que otros tipos de cáncer.
Cuando hablamos de tasas de supervivencia nos referimos al porcentaje de pacientes que presentan el mismo tipo de tumor y etapa evolutiva durante un periodo de tiempo determinado tras el diagnóstico.
En el caso del cáncer de próstata, este periodo suele ser de 5 o 10 años en un 98% de los casos, aunque depende del paciente y de sus patologías previas.
De cualquier forma, y como ocurre con otros tumores, el diagnóstico precoz es fundamental para que el tratamiento sea más eficaz. De ahí la importancia de fechas como el Día de la Salud Prostática para poner en valor la necesidad de someterse a revisiones urológicas periódicas y a pruebas de determinación del PSA en hombres a partir de 50 años o más jóvenes, sobre todo cuando existen antecedentes familiares de este tipo de tumor.
Si quieres mantener tu salud prostática, consulta con tu médico o contacta con nuestra clínica.
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