MURCIA. Se ha hecho de rogar, pero al final el Gobierno murciano da una tregua a los hosteleros de la Región de Murcia. La Comunidad se mantuvo inflexible durante los días festivos de Semana Santa y Semana de Primavera y no levantó ninguna de las restricciones, para disgusto de la patronal de la hostelería regional, que reclamaba relajar el toque de queda para, al menos, poder salvar las ventas de las cenas. Finalmente el Comité Covid ha atendido este lunes las quejas ante la buena marcha de la evolución epidemiológica y ha relajado parte de las medidas, pero no todas. No en vano, formaciones políticas como Vox pedían el fin del toque de queda, una decisión que a día de hoy no se plantea el Ejecutivo regional.
El toque de queda, así, se retrasa una hora a partir del miércoles, el día en que entrará en vigor. El nuevo horario abarcará desde las once de la noche hasta las seis de la mañana. En esa franja horaria no se podrá circular por las calles ni tampoco podrán operar aquellas actividades consideradas no esenciales. Es decir, los bares y restaurantes deberán estar cerrados y únicamente podrán servir establecimientos imprescindibles como farmacias, gasolineras y tiendas de comida.
El Gobierno regional también ha levantado otra prohibición: las reuniones en casas ajenas volverán a estar permitidas en la Región de Murcia. Esta medida se tomó en los días previos del festivo de San José para evitar la relajación de la Navidad, cuando se produjeron numerosos encuentros sociales y familiares que generaron, a la larga, un repunte generalizado de los contagios que desembocó en la tercera ola. Esta limitación, que ha durado un mes, se prolongó durante Semana Santa y Semana de Primavera.
Ahora el Comité Covid considera que no hay motivos para que se mantenga y limita, desde este miércoles, los encuentros en domicilios privados a cuatro personas no convivientes como máximo. En lugares públicos continuará la misma cifra que hasta ahora: también cuatro asistentes como máximo.
En cambio, sí se amplía el número de comensales permitidos en las mesas de las terrazas. Pasan de cuatro a seis no convivientes. Se trata de otra de las novedades anunciadas por el Comité este lunes. Los interiores de los restaurantes, sin embargo, se mantienen con sólo cuatro clientes por mesa y con un aforo del 30%.
Otra gran restricción que no se toca es el cierre perimetral autonómico, que una semana más seguirá vigente en la Región de Murcia. El Gobierno central ya anunció que el estado de alarma decaerá el próximo 9 de mayo. A día de hoy se desconoce hasta cuándo perdurará el toque de queda y el cierre perimetral. El presidente murciano mostró su desacuerdo por esta medida -que considera precipitada- y este lunes el consejero de Salud pidió "criterios únicos de actuación para contar con "herramientas suficientes para actuar en el territorio, ante un aumento de los contagios con medidas científicamente contrastadas"
Todos los expertos hablan de la inminente llegada de la cuarta ola. La Región, de momento, afronta una favorable evolución de los positivos. La cifra de casos activos se remonta a niveles de julio, con solamente 453 murcianos afectados por la covid, según ha detallado el consejero de Salud. De hecho, la incidencia acumulada en 14 días se sitúa en 69 infectados por cada 100.000 habitantes.
Hasta 34 municipios cuentan con un nivel de riesgo bajo; entre ellos se encuentran las ciudades más pobladas: Murcia, Cartagena, Lorca y Molina de Segura. Únicamente quedaba confinada por su riesgo extremo Puerto Lumbreras mientras que Torre Pacheco sale del cierre perimetral y puede abrir el interior de sus bares. No hay localidades en riesgo muy alto. Y en nivel medio-alto quedan diez: Torre Pacheco, San Javier, Calaspara, Cieza, San pedro, Abanilla, Lorquí, Los Alcázares, La unión y Alguazas.