MURCIA. El corredor ferroviario entre Alicante y Murcia, es una de las líneas de Cercanías de mayor tráfico de España y que contribuye a la interconexión de, además de Alicante y Murcia, de todas las demás ciudades que hay en su recorrido. Este se conforma como un continuo poblacional de fundamental importancia, nunca concluido ni en Alta Velocidad ni en Mercancías y, a pesar de ser utilizado anualmente por unos de tres millones de personas, tampoco como Cercanías.
Este continuo retraso por años y años en la conexión de la Región a los grandes ejes de comunicaciones portuarias (nuevo puerto de El Gorguel), viarias, aeroportuarias y ferroviarias (AVE directo con Albacete y el Corredor Mediterráneo de pasajeros y mercancías) no tiene ninguna justificación alguna. Esta situación ha condicionado y sigue condicionando su desarrollo, lo que ahora se agravaría mucho más si sigue adelante el proyecto de ADIF en la conexión ferroviaria entre las ciudades de Alicante y Murcia, tanto en las Cercanías como en Mercancías.
Esta actuación seria altamente preocupante y condicionaría aún más el desarrollo regional, lo que obliga al presidente López Miras, a través del dialogo y la negociación (demostrando las graves consecuencias que la actuación planteada por ADIF puede conllevar), a conseguir los acuerdos necesarios con el Gobierno de España para la planificación en el tiempo de la realización de todas las infraestructuras recogidas en el acuerdo del 6 de marzo de 2020 y en el PITVI, que recogía su ejecución durante el periodo 2012-2024 que este año finaliza, y que es necesario hacerlas ya realidad.
ADIF sigue olvidando a la Región, con el proyecto del trazado y de la total electrificación de la línea entre Alicante-Murcia, obviando las demandas razonadas de la sociedad civil murciana, de llevarse a cabo el proyecto como lo plantea ADIF perjudicaría seriamente la interconexión de ambas ciudades, olvidando su importancia para ambas, a pesar de ser una de las principales líneas de cercanías de España, y que anualmente utilizan entorno a tres millones de personas.
Lo que vuelve a plantear ADIF, según las ultimas informaciones que hemos conocido, no responde a la realidad ni la necesidad de estos territorios. Así se puede constatar en el esquema de ADIF realizado por Francisco García Calvo, Ingeniero especialista en ferrocarriles, recogiendo los corredores ferroviarios entre Alicante y la Región, del AVE, Cercanías y Mercancías:
En el esquema, la línea gruesa es vía doble, la línea azul es ancho internacional, la línea roja es ancho ibérico y la línea verde es el tercer hilo (carril) que quieren poner para hacer las vías en el AVE en la Región de Murcia en dos anchos, el ibérico para cercanías hacia Madrid y el internacional para el AVE y todo tipo de trenes en el Corredor Mediterráneo, olvidando el corredor de las mercancías que sigue parado en Monforte. En el esquema aparece la conexión en AVE con el aeropuerto de Alicante, pero nuevamente olvidan la conexión de Cartagena y Murcia en AVE con el aeropuerto de la Región de Murcia. ¿Por qué este permanente castigo?
El proyecto inicial del corredor de Alta Velocidad entre Alicante y Murcia conllevaba dos líneas en ancho internacional y pasaba por debajo del Trasvase Tajo-Segura. A través de un reformado, ADIF suprimió a partir de San Isidro una de las líneas del AVE en ancho internacional y la transformó en una línea de ancho ibérico, por lo que sigue habiendo una sola línea de alta velocidad en este tramo.
En otro reformado sustituyó el paso del AVE por debajo del Trasvase y lo elevó por encima de este, lo que le supone pendientes muy elevadas que, en muchos casos, para los trenes de mercancías requeriría de dos cabezas tractoras.
Lo que nos muestra el esquema es que el Ministerio proyecta entre San Isidro y Murcia restituir la doble línea de Alta Velocidad (no ejecutada, por ello actualmente tenemos una sola línea de AVE) entre Murcia, la estación soterrada de Orihuela y San Isidro, y una vía única de ancho internacional desde San Isidro hasta Elche, el Altet y Alicante, alejándose de la costa, y evitando el retroceso actual desde San Gabriel para entrar invirtiendo la marcha hacia Alicante.
En su visita a Alicante en mayo, antes de las elecciones locales y regionales, la secretaria de Estado del MITMA, Isabel Pardo, confirmaba la variante de Torrellano y el enlace con el aeropuerto de el Altet, una noticia importante para Alicante, y obviaba la petición reiterada de la sociedad murciana y de FERRMED de la continuidad del corredor ferroviario para las mercancías, vital para la gran área agroindustrial que conforman la Región de Murcia y Almería.
El corredor ferroviario en Alta Velocidad con Albacete (no Chinchilla) es de una absoluta prioridad para la Región de Murcia y Almería, pero sigue durmiendo el sueño de los justos a pesar de estar incluido en el PITVI 2012-2024, lo que está condicionando gravemente el desarrollo de estos territorios, una situación que no puede ni debe esperar más.
¿"Por qué no se pone en marcha un plan de inversiones extraordinario para la adecuación del ferrocarril al ancho europeo a su total electrificación?"
El Corredor Mediterráneo no es solo el AVE, es mucho más. Es un vector que contribuye decisivamente al desarrollo social y económico e integra, por una parte, mercancías y personas y, por otra parte, que permite (¡a diferencia de un AVE!) combinar Cercanías, Media Distancia y Larga Distancia. Además, conecta los diferentes medios de transporte mediante las estaciones y terminales intermodales, barco/camión/ferrocarril.
El Corredor Mediterráneo para las mercancías sigue parado en Monforte desde hace lustros, como ya ocurrió con la Autopista del Mediterráneo, lo que conllevó a una continuada perdida de oportunidades para el desarrollo de la Región de Murcia. El BOE el 8 de noviembre de 2011 ya publicaba el concurso del contrato de servicios para la redacción del "Estudio de viabilidad de una línea de uso exclusivo de mercancías entre Murcia y Monforte del Cid".
EL AVE ha llegado parcialmente a la Región y, muchos lustros después de que llegara al resto de las capitales autonómicas, sigue sin llegar a Cartagena ni a Lorca, y aún no se ha recuperado la conexión con Andalucía. Hacerlo realidad es una absoluta prioridad. En un hecho, como ha recogido Murcia Plaza, que España se está retrasando en la inversión de los fondos europeos, un hecho que no es entendible.
Cuando para la Unión Europea es absolutamente prioritaria la modernización del ferrocarril y el desarrollo de la intermodalidad, carretera-ferrocarril-barco (nuevo puerto de El Gorguel), el Corredor Mediterráneo sigue sin completarse y la conexión con Albacete tampoco se emprende. La pregunta que nos hacemos es ¿por qué esta situación? ¿Por qué no se pone en marcha un plan de inversiones extraordinario para la adecuación del ferrocarril al ancho europeo a su total electrificación, para contribuir a la vez decisivamente a la mejora medioambiental?
FERRMED ha demostrado, con los estudios realizados y enviados al Ministerio, la rentabilidad social y económica de la continuidad del corredor ferroviario para las mercancías en paralelo a la A-7 hacia Murcia. Esto incluye su conexión con el actual corredor por el este para conectar los puertos de Escombreras, el nuevo puerto de El Gorguel, la ZAL de los Camachos y la ZAL de Murcia, para las mercancías en paralelo a la A-7 hasta Lorca y su desdoblamiento en líneas mixtas hacia Almería y Granada, recuperando el histórico corredor con Andalucía, como recogen el anexo I y II del PITVI en vigor, y cuya realización seguimos esperando. Retrasos y retrasos mientras la Región de Murcia ve como se aleja de otros territorios.
Cambiar esta situación y recuperar el pleno desarrollo precisa de un compromiso de todos los parlamentarios, senadores, partidos políticos y del Gobierno de la Región y, singularmente, del presidente López Miras, que ha de dejar atrás el pasado e implicarse plenamente en liderar la Región para anticipar el futuro que se merece. Y cuenta con claras ventajas para conseguirlo.
Para ello, es preciso del diálogo y la negociación, y acordar con el gobierno nacional la realización del nuevo puerto de El Gorguel y de los corredores ferroviarios con Cartagena, Albacete y Alicante, que se encuentran en grave riesgo para el futuro de la Región, así como la conexión con Andalucía conforme al acuerdo de la sociedad civil del 6 de marzo de 2020 y enviada al presidente del Gobierno.
La Región no puede hacer realidad todas sus fortalezas sin las infraestructuras de comunicaciones, tantas veces demandadas y más aún olvidadas. Sí no se consigue su programación es muy difícil atraer talento e inversion, para acabar con el diferencial negativo con la media nacional, que hoy se sitúa entre 15 y 18 puntos por debajo. La realidad es que cuanto más se retrasen las infraestructuras más complicado y difícil será la recuperación.