BRUSELAS (EP). El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha asegurado este jueves que el principio de acuerdo para desbloquear el paquete presupuestario y el fondo de recuperación es "una victoria del sentido común" y ha afirmado que está "muy cerca" de conseguirse el visto bueno del resto de líderes europeos.
A su llegada a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno, el húngaro ha señalado que la "preparación" de este pacto ha sido "bastante larga" y ha destacado que los Veintisiete están " a un centímetro" de conseguir el "consenso". "Mi opinión es que estamos muy, muy carca de un buen acuerdo para la unidad de la UE", ha dicho.
"Hoy estamos luchando por la unidad de nuestro continente común, y lo que es más importante, no por la victoria de la UE, estamos luchando por la victoria del sentido común", ha expresado Orbán.
"Porque es obvio que cuando nuestras naciones y tantos millones de ciudadanos tienen una verdadera necesidad a causa de la pandemia y las consecuencias económicas, tenemos que actuar razonablemente y encontrar una enfoques fiables y la victoria del sentido común", ha añadido el primer ministro húngaro.
Los líderes de la UE decidirán este jueves si dan su visto bueno al pacto que Hungría y Polonia han acordado con Alemania, que como presidencia de la UE ha liderado los contactos con Budapest y Varsovia para que levanten su veto a todo el paquete presupuestario. Estos dos países rechazan en particular el nuevo mecanismo con el que se podrá suspender el pago de ayudas europeas si no se respeta el Estado de derecho.
Los Veintisiete valoran una declaración en la que se enfatizaque el objetivo de este mecanismo es "proteger el presupuesto europeo y el fondo de recuperación de cualquier tipo de "fraude, corrupción o conflicto de interés" y también garantiza que su aplicación será "imparcial" y "no discriminatoria".
Además, establece que la Comisión Europea no suspenderá el pago de ayudas europea hasta que la Justicia europea haya resuelto un posible recurso sobre la legalidad del mecanismo. En la práctica, esto supone que no se podrán suspender pagos a países que violan los principios fundamentales del bloque hasta dentro de al menos dos años.
Sin embargo, no modifica el texto legislativo que pone en marcha el mecanismo de condicionalidad. El comisario de Economía, Paolo Gentiloni, ha subrayado por ejemplo que se trata de una declaración "muy útil" porque "puede darse un paso adelante" sin que "se haya tocado mínimamente el acuerdo" que cerraron los Estados miembros con el Parlamento Europeo.