MURCIA. El ECOS Festival Internacional de Música Antigua de Sierra Espuña se enfrenta al último fin de semana de su octava edición. Tras colgar el cartel de entradas agotadas en prácticamente todas sus citas, los dos últimos protagonistas llegan desde el extranjero para conectar con la naturaleza, el patrimonio y la cultura de este territorio en torno a la música antigua. Los encargados de abrir el fin de semana serán los belgas Ayres Extemporae, que forman parte de la programación tras años siguiendo la actividad de este festival.
"Admiramos el gran trabajo que se está haciendo para apoyar a grupos de música antigua emergentes, y agradecemos tener la oportunidad de poder presentar nuestra propuesta en entorno tan maravilloso", indican desde el ensemble. Y es que su primera parada será en los Jardines del Santuario de la Santa de Totana, este viernes a las 21.00 horas, donde presentaran una propuesta artística centrada en la experimentación con la realización del bajo continuo con instrumentos de arco, haciendo un rol que tradicionalmente desempeña un clave u otros instrumentos. Así, Xenia Gogu (violín barroco), Víctor García (violoncello piccolo) y Teresa Madeira (violonchelo barroco) buscan involucrar al público en una sonoridad diferente y novedosa a la hora de realizar la armonía, haciendo que el violoncello piccolo haga el papel de conexión entre el bajo tocado por Teresa y el violín tocado por Xenia.
El programa está dividido en dos partes muy contrastadas para aportar al público dos mundos sonoros diferentes: la primera se centra en la Roma barroca, un epicentro cultural de aquella época, con obras de Corelli, Bononcini, Stradella y Valentini, que se consideran los mayores representantes de la escuela romana y una de las más influyentes de Europa; la segunda parte representa un proceso interno del ser humano que empieza en el origen de su tormento y desesperación por los errores cometidos, la aceptación de su imperfección y el perdón de uno mismo. "A través de la música de Locke, Biber y Bach, esperamos recorrer juntos este camino espiritual en búsqueda de la absolución personal", señalan en referencia a esta parte final de su concierto.
No será su única parada en el ECOS Festival, ya que al día siguiente, el sábado a las 12.00 horas en el Castillo de Aledo, darán un concierto familiar para que los más pequeños pasen un momento inolvidable, con aforo completo. "Queremos compartir con ellos los diferentes afectos en la música barroca y pensamos que lo van a disfrutar mucho, ya que es un repertorio que llega de una manera muy directa a cualquier público", señalan.