CARTAGENA (EP). Ya es oficial. La Región de Murcia ya tiene aprobadas sus cuentas para este 2025. La Asamblea Regional ha convertido en ley el proyecto de ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma. El PP y Vox han hecho valer su acuerdo para que el texto salga adelante con 21 votos a favor de los populares de Fernando López Miras y la abstención de los nueve diputados de la formación de José Ángel Antelo. Los 13 representantes de PSOE y los dos de Podemos e Izquierda Unida votaron en contra.

Son las cuentas más elevadas de la historia, con una cuantía que asciende a 6.725,8 millones de euros, lo que significa un aumento del 3,76% con respecto a 2024, cuyo Presupuesto sigue vigente hasta hoy, prorrogado. Son también los Presupuestos más tardíos de la historia, pues nunca se votaron en el mes de julio. El Gobierno regional no quiso presentar el texto -ni tampoco el techo de gasto- hasta que no cerró un acuerdo con Vox; una espera que se prolongó seis meses, pues el pacto se firmó el 6 de junio. Y se consuma hoy.

El debate ha estado marcado por el tono duro de la oposición de izquierdas, con el recuerdo presente de los altercados de Torre Pacheco. La portavoz del Grupo Mixto y diputada de Podemos, María Marín, se levantó de su escaño y se acercó al asiento de Antelo, el líder de Vox, para hacerle entrega de un capirote blanco del Ku Klux Klan. La presidenta de la Asamblea, que llamó al orden en dos ocasiones a la parlamentaria morada, ordenó la retirada del capirote mientras que Antelo le pedía a Marín: "Haga el favor, coja el micrófono y dígalo en voz alta para ponerle a usted una querella".

Además, a primera hora de la mañana hasta 48 colectivos se reunían a las puertas del Parlamento para protestar contra los Presupuestos, por considerarlos que son las "cuentas del odio". Los manifestantes hicieron un llamamiento a la población “a defender sus derechos y su tierra, a luchar por un futuro digno para las generaciones futuras, a organizarse y movilizarse”.

La portavoz parlamentaria del PSOE, Carmina Fernández, que fue la primera en intervenir en la tribuna de la Cámara, recriminaba que las cuentas "llevan el sello ideológico de PP y Vox, supervisado por Feijóo y Abascal", en la que los populares aceptan "punto por punto el marco de la extrema derecha para aferrarse al poder. "Esto no son Presupuestos neutros, porque este pacto tienen una carga ideológica y consolidan las políticas de ultraderechas y consagran las políticas de odio y legitiman la intolerancia, pues ni siquiera llegó a tanto Vox cuando esteban el Gobierno regional". 

Fernández quien a última hora, casi a la desesperada, volvía a pedir que rompiera con Vox, también lamentaba que no salieran adelante las 191 enmiendas del PSOE, el "antídoto" contra el pacto de PP con Vox. De hecho, la totalidad de las enmiendas de PSOE y Grupo Mixto volvieron a ser rechazadas en el pleno.

Vox había firmado un acuerdo con el PP y también pactó las enmiendas con los populares, pero eso no impide que se lancen críticas. Especialmente desde Vox hacia el PP. Rubén Martínez Alpañez tachó las cuentas de "gatopardistas" y arremetió contra los populares y también los socialistas por "40 años de corrupción y engaño". "Llevan 28 años engañando a los ciudadanos, pues yo les pido a la sociedad que me dejen engañarles cuatro años a mí", ha manifestado.

El PP defendió que son unos Presupuestos "pensados por y para la gente, para todas las personas que viven en nuestro país". Joaquín Segado centró parte de su discurso en criticar a Pedro Sánchez, al que acusa de de "desmantelar instituciones" y gobernar "únicamente para el beneficio de su partido". A su juicio, "frente al bloqueo y la inoperancia, el Partido Popular ofrece estabilidad y soluciones a los problemas de la gente".