MURCIA. Satisfacción plena. Esa es la sensación que tiene el PP de la Región de Murcia a la hora de hacer balance de la cumbre celebrada este fin de semana en la capital del Segura entre los 13 presidentes autonómicos y el líder del partido. La cita volvió a poner a Murcia en los principales titulares de la agenda nacional, ya que los barones presentes (si bien al mitin final en el Teatro Circo no acudieron los máximos mandatarios de Andalucía ni La Rioja ni el de Melilla) se comprometieron a una serie de promesas relevantes para el país, como son las medidas anunciadas en inmigración o como es, muy pertinente para la Región, el plan nacional del agua, dotado además con 40.000 millones de euros.

"Un éxito". Así lo destacaba José Miguel Luengo, el alcalde de San Javier y número dos del partido en la Región. "La Región sale reforzodada" porque "Feijóo se compromete con una reivindicación histórica de nuestro sector primario y, en general, de la sociedad civil de la Región para que no se frene la generación de riqueza y prosperidad, no solo para nuestra tierra, sino para toda España", aducía. A su juicio, el líder nacional "presenta una política de agua basada en el consenso y el acuerdo entre comunidades autónomas, que ponga fin a la división, al enfrentamiento y la crispación que promueve el Gobierno de Sánchez”.

Además, el secretario general también sacó pecho de "la fuerza" y "la influencia" en  la dirección nacional del líder regional, Fernando López Miras, que ejercició como anfitrión desde el viernes por la noche hasta el domingo con sus 13 homólogos (11 comunidades autónomas y las dos ciudades autónomas). Feijóo no dudó en deshaceserse en elogios hacia el mandatario regional, de quien presumió por su "estado de forma". Y también dejó la anécdota del día, al describirle como "lorcano" y no como lorquino, en una confusión con el gentilicio de Lorca. Con todo, Luengo valora la "sensibilidad e implicación" de Feijóo en los intereses regionales. El presidente del partido ha visitado ya en 14 ocasiones la Región desde que llegó a Génova, cuatro en en lo que llevamos de año.

La cumbre se saldó con la firma de un documento de 16 páginas, titulado 'Declaración de la Región de Murcia'. El texto, suscrito por todos los barones autonómicos, se divide en cuatro bloques: igualdad; inmigración; transporte infraestructuras y energía, así como defensa del sector primario. Uno de los compromisos más relevantes para la Región de Murcia y el Levante español es "la necesidad" de un pacto nacional del agua, “que determine la planificación hídrica como una política de Estado”. 

En su intervención en el mitin, Feijóo puso cifras a ese acuerdo: 40.000 millones de euros. "El plan nacional del agua está dotado con 40.000 millones para acabar con tierras secas que necesitan simplemente el agua de donde sobra en las tierras húmedas”, aseveró. "Hemos de reutilizar y reciclar el agua, y cuando falte agua, hay que atraer el agua de los sitios de donde sobra. Eso es lo razonable”, expuso, en referencia a los trasvases (una palabra que no mencionó) y convencido de que “el PP habla con sentido, pero no enfrentando, sino planificando”. Y apostilló: "Ese es un Estado, esa es la solidaridad; eso es un proyecto nacional, eso es unir a la gente, y no enfrentarla".

Para Luengo, no hay dudas: es una apuesta del presidente del PP por una inversión de 40.000 millones de euros en un plan "que incluya trasvases” frente a "la pretensión de Pedro Sánchez de cerrar el Tajo-Segura". La declaración de la Región de Murcia, añadió, "supone un claro espaldarazo al campo, a un sector estratégico para nuestra Región como es el primario, con la exigencia de una Política Agraria Común sin recortes, un Plan de Simplificación Administrativa que haga frente a la maraña burocrática o una Ley Nacional de Relevo Generacional para hacer atractiva la incorporación de los jóvenes al medio rural".

El secretario general también puso el acento en que el texto firmado incluye un plan nacional de Infraestructuras que "acabará con años de castigo y maltrato a la Región”, ya que “se diseñará de forma coordinada y consensuada con comunidades autónomas y entidades locales". Y no se olvidó del tema que copó la actualidad política del país: el modelo migratorio. "Es una política migratoria clara, basada en una inmigración legal, ordenada y que promueva la integración, frente a la inacción de un Gobierno de Sánchez que la utiliza como arma política y transfiere toda la responsabilidad a las comunidades autónomas, como estamos comprobando y sufriendo en la Región de Murcia"