MURCIA. Las obras de remodelación de la Plaza de Abastos de Verónicas en Murcia avanzan a buen ritmo y la planta superior ya entra en la fase final. El proyecto busca recuperar el carácter histórico del mercado, poner en valor su arquitectura original y mejorar la experiencia de quienes lo visitan, preservando su importancia como mercado tradicional de la ciudad.

Entre los trabajos más visibles, se han reemplazado los paños de ladrillo en 40 arcos laterales y en las dos portadas de testeros, utilizando 65.000 ladrillos. También se ha restaurado el zócalo de piedra de 375 metros cuadrados y se han limpiado y recuperado elementos ornamentales como capiteles, frontones, escudos, motivos florales, arcos, columnas y pináculos.

En la carpintería, se han retirado estructuras de hierro y lamas de hormigón, colocándose la mayoría de los recercados metálicos que servirán de base para las nuevas carpinterías de aluminio lacado. La cubierta, uno de los puntos más complejos, ha sido reforzada y tratada contra el fuego, con una nueva base de madera, aislamiento térmico y lámina impermeable. En los próximos días comenzará la colocación de tejas planas, y se ultiman los trabajos para restaurar las puertas monumentales, recuperando sus elementos originales.

El concejal de Turismo, Comercio y Consumo, Jesús Pacheco, señaló que la segunda fase del proyecto, aún pendiente de financiación, contempla eliminar la entreplanta para potenciar el carácter monumental de la plaza y renovar estéticamente los puestos de la planta baja.

El presupuesto de la primera fase asciende a 3,1 millones de euros, y a pesar de la intensidad de los trabajos, los puestos del mercado han podido seguir funcionando con normalidad. Esta fase estaba prevista para finalizar entre finales de septiembre y principios de octubre.

Cabe recordar que junio se comenzaron los trabajos en la fachada del edificio, colocando los primeros cinco de los 40 arcos previstos, con el objetivo de mejorar la funcionalidad y el confort del histórico mercado. Asimismo, se continuó con el desalojo de materiales en la primera planta, paso necesario para poder iniciar la retirada de la cubierta, prevista para principios de agosto.