MURCIA. El aeropuerto de San Javier dejó de recibir aviones comerciales a finales de 2018. Desde entonces el tráfico aéreo civil de la Región de Murcia se concentra en el conocido como aeropuerto de Corvera. Siete años después, la Comunidad está decidida a resucitar la antigua terminal de San Javier con dos futuros proyectos que la volverán a 'dotar de vida'. Por un lado, las dependencias acogerán un vivero de tecnología aeroespacial y, por otro, albergarán el Centro de Recuperación y Conservación de Especies del Mar Menor (OM2), también conocido como el Observatorio del Mar Menor. Ambas iniciativas se encuentran en fase inicial, pero ya ha comenzado a correr el contador para que se conviertan en sendas realidades.
Así será el Observatorio del Mar Menor
En el caso del Observatorio del Mar Menor, la Comunidad sacó a licitación el pasado 26 de junio la redacción del proyecto para adecuar el aeropuerto ribereño en un centro pionero dedicado a la recuperación y conservación de la biodiversidad. La licitación tiene un presupuesto de 345.508 euros y, según pudo comprobar este diario, este jueves concluyó el plazo para que las empresas pudieran pujar por esta acción que definirá "la transformación de esta infraestructura en un equipamiento de referencia para la atención, rehabilitación y conservación de la fauna marina y terrestre, con especial foco en las especies que habitan en el Mar Menor".
El próximo miércoles, 30 de julio, está previsto la apertura de los sobres con las ofertas para su valoración en la Secretaría General de la Consejería de Medio Ambiente. La adjudicataria contará con ocho meses para la elaboración del anteproyecto, proyecto básico, proyecto de ejecución y los proyectos de las instalaciones. También está incluida una auditoría inicial para evaluar el estado actual de la edificación y sus sistemas constructivos y de instalaciones.

- Instalaciones interiores del aeropuerto de San Javier. -
- Foto: PLIEGO DEL PROYECTO
El futuro Observatorio del Mar Menor, que no interferirá con las actividades de la Academia General del Aire, dispondrá de 16 tanques que ocuparán 854 metros cúbicos. El espacio que se utilizará, sin uso hoy en día, asciende a una superficie aproximada de 4.515 m². Nueve de los 16 tanques se dedicarán al estudio exclusivo de especies autóctonas del Mar Menor, cuyo ecosistema es tan único en el mundo como frágil. Otras tres zonas se habilitarán para analizar la biodiversidad característica de la costa de la Región en el Mediterráneo y otras cuatro se cenetrarán en el seguimiento de otras especies marinas.
El Gobierno regional ha reservado unos 2 millones de euros en los Presupuestos de 2025, recientemente aprobados y que este jueves han entrado en vigor con su publicación en el Boletín Oficial de la Región (BORM). El recinto, explican desde la Consejería de Mar Menor, contará igualmente "con laboratorios y áreas técnicas para la atención veterinaria, la recuperación y el seguimiento científico de especies amenazadas, así como zonas de semilibertad al aire libre que facilitarán la recuperación progresiva de ejemplares antes de su regreso a su hábitat natural".

- Caballitos de mar el Banco de Especies del Mar Menor. -
- Foto. CARM
El diseño, asimismo, prevé espacios abiertos al público para impulsar la educación ambiental y la sensibilización sobre la importancia de proteger la biodiversidad local. Además, las actuaciones previstas abarcan también la adecuación del aparcamiento cubierto de coches y autobuses, los viales de acceso desde la carretera RM-F34, el cerramiento perimetral de la parcela y la instalación de sistemas de control de accesos.
¿Cómo se estructurará el centro? En tres grandes zonas. Según detallan desde la Consejería, "la primera, dedicada a la conservación de especies marinas, se dividirá en tres áreas: una zona privada de laboratorios y espacios técnicos (talleres, laboratorios, almacenes, cuarentenas y área de buceo), una zona de laboratorios parcialmente expuestos al público (para fitoplancton, zooplancton y desarrollo larvario) y un área de divulgación con tanques de especies, aulas de formación, sala de conferencias y zonas de exposición educativa".
La segunda zona, añaden, "corresponderá a la gestión administrativa, con despachos, salas de reuniones, comedor y áreas auxiliares, mientras que la tercera incluirá los espacios exteriores, con jardines, balsas de semilibertad para especies en recuperación y zonas de urbanización y aparcamiento".
Así será el 'hub' de tecnología aeroespacial
En el caso del vivero para tecnología aeroespacial, el Gobierno regional dio un paso en su tramitación el pasado 17 de julio tras dar luz verde a un presupuesto de 732.655 euros para transformar el edificio 'Bloque Técnico' del aeropuerto en un hub (el término inglés que describe un espacio de varias empresas) de tecnologías duales para el desarrollo de aplicaciones basadas en datos satelitales.
Con esta futura infraestructura, tal y como ya contó este diario, el aeródromo albergará un espacio concreto para que se instalen pymes altamente innovadoras, ‘startups’ y proyectos en el ámbito de las tecnologías aeroespaciales. Esta iniciativa forma parte el programa Caetra, un proyecto pionero de la Comunidad que busca impulsar las tecnologías duales en defensa, seguridad y reconstrucción.
De hecho, el hub también acogerá los cursos de capacitación especializada en el desarrollo de tecnologías satelitales que se programen con Caetra. También estará preparado para desarrollar programas de aceleración de pymes altamente innovadoras, ‘startups’ y empresas spin-off procedentes de universidades y centros tecnológicos de la Región.

- Aeropuerto de San Javier. -
- Foto: AYUNTAMIENTO DE SAN JAVIER
El Instituto de Fomento (Info) prevé sacar a licitación "en las próximas semanas" las obras de adecuación y mejora de las instalaciones en una superficie de 4.080 metros cuadrados. De toda la partida destinada (732.655 euros), los fondos europeos Feder cofinanciarán hasta un máximo del 60%, tal y como explican desde el Ejecutivo.
Las obras se centrarán en la planta baja del 'Bloque Técnico' y en la parcela que lo rodea, incluidos los "parcamientos cubiertos y descubiertos, zona verde, espacios de ocio, infraestructuras de depósito de agua o alumbrado exterior".
El futuro vivero contará con una zona de control de accesos en la entrada. Dispondrá de seis módulos flexibles para empresas dotados de conectividad; además de "dos aulas polivalentes para formación, celebración de talleres y usos variados, distribuidas y equipadas con los criterios de homologación que establece el Servicio regional de Empleo y Formación (SEF)", como así detallan desde la Comunidad.
También tendrá una sala de reuniones; dos módulos para ubicación de personal de gestión del centro; una sala multiusos, para comedor interno; dos almacenes; una sala de conexión de telecomunicaciones y recursos informáticos; aseos; zona verde y de recreo/ocio; y zonas de aparcamiento. Igualmente, añaden, las nuevas instalaciones estarán dotadas de videovigilancia y sistemas de alarma y contraincendios en espacios comunes y privados, con detectores/sensores coordinados con los servicios de seguridad del recinto.