El Ayuntamiento de Torre Pacheco ha sacado a licitación el servicio de desinfección, desinsectación y desratización para los próximos dos años. El Ayuntamiento estima que el contrato podría costarle a las arcas municipales unos 228.000 euros.
“La línea general de actuación en todos los trabajos asociados a esta prestación de servicio será la de gestión ambiental como aspecto esencial y prioritario en la prevención y en el control de plagas. Por lo que permitirá una reducción-minimización en el empleo de biocidas (tratamientos). Los objetivos del servicio requerido son la identificación de los peligros relacionados con las diferentes plagas, así como la reducción a niveles compatibles con la salud pública de los riesgos asociados a estos animales, manteniendo el nivel de las poblaciones de animales por debajo de los niveles de tolerancia o “umbrales de plaga” correspondientes y preestablecidos. Teniendo en cuenta que el Ayuntamiento de Torre Pacheco no dispone los medios técnicos y los recursos humanos para el cumplimiento de estos fines es por lo que es imprescindible llevar a cabo la contratación de este servicio necesario para mantener la salud pública en nuestro municipio”, justifica el Ayuntamiento en el pliego para sacar a licitación este servicio.
“Constituye el objeto del contrato la elaboración y desarrollo de un Plan Integrado de Control de Plagas consistente en la desratización, desinfección y desinsectación (en adelante DDD) en centros y dependencias de titularidad municipal. El trabajo deberá conseguir el más alto nivel de control sobre la población de múridos, artrópodos vectores y no vectores y otros parásitos y microorganismos todos ellos vectores de enfermedades y potencialmente peligrosos para la salud, de acuerdo con las normas de actuación que establece este Pliego, reduciendo las poblaciones a niveles mínimos en los que no presenten riesgos sanitarios o molestias de cualquier índole a la población, trabajadores y usuarios”, explica el contrato. “El Programa habrá de realizarse mediante una permanente atención a lo largo del año de los puntos conflictivos, aunque deberá tener carácter intensivo en las épocas del año en que por las características biológicas de estas especies sea más conveniente, hasta conseguir la reducción suficiente de sus poblaciones, y la atención continuada de las incidencias que en relación con las especies sujetas a control pudiesen acontecer”, añade. El Ayuntamiento es consciente que las plagas pueden variar dependiendo de la naturaleza y características de la zona o edificación. “Sin embargo, deberá siempre concordar con los siguientes objetivos: proporcionar el ambiente más sano posible, reducir al máximo el uso de biocidas de alto riesgo, evitar los daños económicos y para la salud causados por las plagas, mantener la integridad estructural, y no basar las decisiones del control de plagas solamente en criterios estéticos o químicos”, explica.
“Todas las operaciones serán realizadas por personal suficientemente cualificado, con todas las medidas de seguridad necesarias y extremando las precauciones para evitar que se produzcan situaciones de riesgo, tanto entre el personal que realice los tratamientos, como de todos aquellos ocupantes de las instalaciones a tratar. En ningún caso las actuaciones que se desarrollen causarán molestias a la población, usuarios o trabajadores, ni perturbarán el funcionamiento de los servicios y el desarrollo diario de la actividad”, señala el contrato.