CARTAGENA. A comienzos de este 2021 veíamos los muebles subidos a un camión rumbo a Granada. Ahora ya podemos ver, tal y como nos indica la imagen que acompaña la información, que su instalación es un hecho y que el 'destierro' está consumado. La botica de la calle Mayor de Cartagena se convierte en parte del patrimonio de la universidad granadina, después de que los propietarios del mobiliario de esta emblemática farmacia lo vendieran a la institución, al considerar que no se había emprendido ninguna intención en el Ayuntamiento de Cartagena por llevar a cabo la adquisición y custodia de la misma.
En 2019 la asociación Asociación de Defensa del Patrimonio de Cartagena (Daphne) se puso en contacto con la familia propietaria para conseguir suspender la venta que habían iniciado por internet, con el fin de conseguir lo que pretendían inicialmente los herederos de María Dolores Ros, quien deseaba que el mobiliario quedara en manos del consistorio.
El pasado mes de julio, MC Cartagena pedía a la dirección general de Patrimonio Cultural la declaración como BIC del mobiliario y que se iniciaran, de esta manera, los trámites para su recuperación.
En fechas recientes, MC Cartagena tuvo acceso al expediente iniciado en 1998 para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) la farmacia de la calle Mayor y su mobiliario. El documento "venía cargado de sorpresas".
MC pretendía proteger los únicos recuerdos que quedan ya de un monumento "expoliado". Al tiempo, se solicitaba que se adoptaran las medidas cautelares necesarias para "evitar el agravamiento del daño causado". Además, "requerimos a realizar las gestiones precisas para que regrese a su ubicación histórica en nuestro municipio".
La botica de la calle Mayor, también conocida como botica Picó, fue una farmacia que se situó durante más de un siglo en lo que hoy es manzana de las calles Mayor, Medieras, Aire y Plaza de San Sebastián. Eduardo Picó convirtió el establecimiento en un centro desde el que participaba activamente en cualquier emergencia sanitaria de la ciudad, además de dar cobijo a actividades artísticas, científicas y políticas.
Críticas: "Cartagena ve con estupor cómo parte del patrimonio se mete en un camión y se monta fuera de su contexto histórico"
Ricardo Segado, concejal de MC Cartagena ve con "estupor" cómo una parte de del patrimonio histórico de Cartagena "se desmonta, se mete en un camión de mudanzas y se monta fuera de su contexto histórico". El Ayuntamiento "debió llegar a un acuerdo definitivo con la familia propietaria de ese mobiliario y comenzar los trámites pertinentes, como ya los comenzamos nosotros pocos días antes de salir del Gobierno, en enero de 2018. Pero este Gobierno tiene otros intereses diferentes a los de pelear por preservar y conservar nuestro patrimonio".
Al final, "como ya sucedió con el Altar de la Salud o los Alabastros (que salieron de Cartagena para ser expuestos en Barcelona y Madrid, respectivamente) otro elemento fundamental para comprender nuestra historia se marcha fuera de Cartagena. Toca seguir luchando para que vuelvan", añadía el concejal.