MURCIA. Ludde Hakanson, base sueco del UCAM Murcia Club Baloncesto, mostró el deseo que tienen en la plantilla por "darle alegría" a una afición a la cual eligió diciendo que "es increíble la forma en la que está con nosotros durante toda la temporada".
El jugador de Estocolmo, de 29 años cumplidos el 22 de marzo y que llegó a Murcia en el verano de 2023 procedente del Surne Bilbao Basket, habló en rueda de prensa tras la quinta derrota consecutiva del equipo grana en casa, encajada el sábado por 82-91 ante el Baskonia, una mala racha que contrasta con la buena que los de Sito Alonso están exhibiendo a domicilio -cinco triunfos en sus seis últimas salidas en la Liga Endesa-.
Los universitarios, que tan sólo cayeron en dos ocasiones la temporada pasada en la fase regular como locales, en esta campaña ya llevan nueve derrotas en 14 partidos delante de su público y su irregularidad tiene al UCAM CB en la décima posición de la clasificación con un bagaje de 12-15, a dos triunfos de los puestos que dan derecho a disputar las eliminatorias por el título.
En el equipo hay ganas de cambiar esa dinámica cuando juega en el Palacio de los Deportes y ya se piensa en hacerlo el sábado a las nueve menos cuarto frente al Joventut de Badalona en ese escenario.
"La afición está increíble con nosotros durante todo el año y queremos darle alegría, lo cual apenas hemos hecho esta temporada en Murcia. Ahora tenemos que mirar lo que hicimos mal e ir a ganar al Joventut", señaló Hakanson, quien admitió un problema de ansiedad por querer vencer en casa.
"Puede ser que sí haya cierta ansiedad pero no hay excusas. Lo tenemos todo para vencer aquí, estamos entrenando bien, tenemos una gran afición y debemos jugar mejor", apuntó.
Con respecto al duelo perdido frente al Baskonia no quiso dramatizar aunque lamentó el desenlace. "No creo que hiciésemos un partido malísimo aunque sí que tuvimos problemas con el rebote y Markus Howard metió cuatro triples increíbles. Lo hicimos más o menos bien ante un rival de Euroliga y no es un drama aunque obviamente que nos hubiese gustado ganar y ya hay que ir a por el siguiente", declaró.
En lo personal el sueco, que promedia 8,9 puntos, 1,5 rebotes, 3,3 asistencias, 1 recuperación y 8,3 de valoración en 22 minutos por partido en sus 26 comparecencias ligueras, reconoció también la falta de constancia en su rendimiento: "Hice unos primeros partidos muy buenos, pero también los hubo muy malos y me gustaría ser más regular".