MURCIA. Dos de dos en las ATP Finals. Carlos Alcaraz Garfia venció también al estadounidense Taylor Fritz -lo hizo remontando por 6-7 (2), 7-5 y 6-3 en 2 horas y 48 minutos de un gran encuentro y con muchísimo ritmo-, roza las semifinales del torneo que se disputa en la ciudad italiana de Turín y está a un triunfo de asegurar el número 1 del mundo que ahora ocupa a final de año, que es lo que ira a buscar el jueves frente al local Lorenzo Musetti.
Era el sexto duelo entre el de El Palmar, de 22 años, y el de Rancho Santa Fe, de 28 y que es el sexto el circuito, y ese cara a cara lo dominaba el murciano por 4-1 con un doble 6-4 a su favor en el precedente más cercano en el tiempo, que se dio en la final del ATP 500 de Tokio el 30 de septiembre. Ya es un 5-1 para Carlos, quien venía de ganar el domingo al australiano Alex de Miñaur por 7-6 (5) y 6-2 y se vio más exigido frente a Taylor, quien había superadoi el lunes al italiano Musetti por 6-3 y 6-4.
El choque ya comenzó siendo un partidazo. Alcaraz, al resto, tuvo las dos primeras bolas de break pero no las aprovechó y a continuación fue Fritz el que dispuso de tres opciones de ruptura con el 15-40 y luego con una ventaja. Alcaraz, sacando a 220 kilómetros por hora, subiendo a la red con determinación e inventándose un globo ganador, superó esos apuros y estableció el 1-1. Lo gritó.
Con sólo dos juegos y nada menos que 20 minutos transcurridos la batalla ya estaba servida. Y en esa lucha el español dio un paso adelante siendo agresivo. Tuvo un 15-40 esperando la pelota y una dejada le dio el break que andaba buscando. Sin embargo, el de California respondió con el contrabreak mostrando solidez y fue a por más. Con un ace, su cuarto, mantuvo el saque y volvió a mandar (2-3).
Sirviendo el español recuperó sensaciones y devolvió la igualdad al encuentro pero su rival seguía amenazando y mucho. Con 3-4 tuvo dos posibilidades de quiebre pero el pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López volvió a escaparse. Le ayudó su primer ace y un saque-volea tremendo sobre la pista dura del Inalpi Arena.
El set avanzaba con cada jugador sumando con su saque -Carlos con más sufrimiento- y asomaba el posible tie break. Lo hubo y en esa muerte súbita la iniciativa siguió llevándola el norteamericano, muy centrado ante un rival que falló con el revés en ese instante crucial. De ahí que se viera 1-4 y 2-5 abajo. Dos saques directos de TF para llegar a la media docena le dieron el set con un rotundo 2-7 en el suplemento. Tras 1 hora y 11 minutos el partido se le complicaba y mucho a CA.
En la segunda manga Carlos, que empezó sirviendo, marcó el ritmo pero Taylor no le fue a la zaga. Así, al 1-0 le siguió el 1-1 y al 2-1 el 2-2. El yanqui tuvo dos ventajas para asestar un golpe que hubiera sido muy duro para su oponente pero el número 1 no lo es por casualidad y se rehizo a base de garra y también de calidad. El 3-2 era suyo habiéndolo sudado una barbaridad pero suyo tras 12 minutos de incesante batalla tenística.
Ese sufrimiento contrastó con la rotundidad con la que Fritz volvió a empatar -lo hizo en blanco- pero no todo iba a ser tan plácido para el californiano, quien también padeció para igualar a 4. Alcaraz dispuso de una opción de break que no hizo buena. La tensión iba a más y Carlos ya no se podía permitir ningún fallo. En ese contexto trató de elevar el nivel pero es que su contrincante no bajaba el suyo. Un 5-5 y luego el 6-5 en blanco con el 6 del mundo cayéndose al suelo pero sin mayores consecuencias.
El palmareño siguió a lo suyo, fiel a su estilo, y tuvo un 0-40 muy goloso. Aunque Fritz quiso arreglarlo ya era tarde porque el líder de la ATP, con una buena derecha cruzada, obtuvo la ruptura y cerró el set después de otros 59 minutos. El triunfo se decidiría en un tercer parcial al que CA parecía llegar mejor. El lenguaje corporal, con él dándose un golpe en el pecho, así lo indicaba.
Ese set definitivo lo arrancó llevándose su servicio en blanco pero también TF ganó el suyo con solvencia. Esa dinámica se mantendría y el español por arriba (1-9, 2-1 y 3-2). El sexto juego de la manga podía ser clave porque Alcaraz volvió a tener un 0-40 y no lo desaprovechó. Su tercer break era oro puro.
Echando la bola al aire iba a dar un paso más hacia la victoria. Dio la sensación de que a Fritz se le fueron las esperanzas aunque a base de aces -terminó con 14 por los nueve de su rival-, resistió. Carlos, quien desperdició tres opciones para cerrarlo al resto, no perdonó en su turno de saque después de otros 38 minutos de una muy buena contienda en la que logró 127 puntos, sólo 12 más que los que hizo el jugador que tenía al otro lado de la red.
