Uno de los problemas latentes en Cabo de Palos en los últimos años, especialmente desde la pandemia, es la acumulación de tráfico en el pueblo y la falta de aparcamiento para la gran cantidad de gente que se desplaza, especialmente los fines de semana, a pasar el día en la playa o a alguno de los restaurantes de la zona. La falta de plazas de parking provoca que, en muchas ocasiones, los coches queden aparcados en cualquier sitio y como sea. El parking disuasorio junto a los cines de Cabo de Palos creado por el Ayuntamiento de Cartagena este verano no ha surtido efecto. “El parking disuasorio ha sido insuficiente, como ya pensábamos, porque no se ha dotado de medios suficientes para que se utilizara y la gente ha seguido circulando con el coche por el pueblo”, apunta Raúl Sánchez, presidente de los vecinos de Cabo de Palos.
Una de las principales quejas de los vecinos es que el visitante, ante la falta de aparcamiento, aparca de cualquier forma. “Se pusieron pivotes azules, pero se ha seguido aparcando sobre la acera y en línea amarilla. Vamos a solicitar que se pongan obstáculos para que no se suban a las aceras, porque no es cómodo andar o pasar con carritos si hay coches sobre la acera”, señala. “Lo normal es que la policía multara, pero ellos mismos nos dicen que no tienen medios. Lo ideal es que se cumplan las normas, pero no es así. El Ayuntamiento nos dice que no hay medios suficientes para la Policía Local. Cartagena debería estar organizada como una ciudad de playa, pero llega verano y se van de vacaciones. Para La Manga y Cabo de Palos quedan dos o tres parejas”, añade Sánchez.
“La Manga tiene una capacidad de carga de vehículos, y esto hay que controlarlo de alguna manera. No hay posibilidades de aparcamiento disuasorio dentro de La Manga, hay muy pocos. Fuera de la manga sí los hay. Entonces, la idea que vamos a lanzar, tanto para los ayuntamientos como para el futuro ayuntamiento de La Manga, si al final se produce, es que La Manga sea una Gran Vía, una zona de acceso restringido. Porque no queda otra, no es una cuestión elitista. Acceso restringido a través de matrículas de coches por vivienda, los que sean. El resto estaría con un sistema de cámaras, como en ciudades que te metes en zonas céntricas, expuestos a una multa”, planteaba el presidente de los empresarios de La Manga y Cabo de Palos hace unas semanas. “Es la única manera. Claro, para esto hay que dar una solución, y la solución son aparcamientos disuasorios fuera de la manga, en la zona de Cabo de Palos, con autobuses lanzaderas que vayan por toda La Manga y Cabo de Palos. Como lo de Calblanque, más o menos igual”, añade.
“O tienes parking en tu urbanización o vivienda, o lo que hay que hacer es buscar un aparcamiento cuando llegas y no moverlo salvo máxima necesidad”, afirman muchos vecinos. “Es la única manera. El tema de los coches en La Manga está totalmente desbordado, los fines de semana todavía más, y hay que controlarlo de alguna manera. Entonces, la gente que quiera venir los fines de semana, como la gente que quiere ir los fines de semana o cualquier día a Calblanque, deja el coche fuera, se coge un autobús, y esa es la única manera que tendría de moverse”, apunta Espinosa. “Podría habilitarse un tren turístico que estuviera continuamente trasladando gente y así tener menos congestión”, añade el presidente de los vecinos de Cabo de Palos.
Si el aparcamiento es uno de los principales problemas, los botellones siguen preocupando, aunque quizá menos que en otros veranos. “Por la zona del pueblo ha estado más controlado. Sin embargo, por la zona de las Dunas y Trips si ha habido más. El botelleo no lo vas a eliminar, es algo que no entiendo pero que asumo. Tampoco puedes habilitar una zona para ello porque es algo ilegal, no puedes beber en la calle. Hay que intentar que no se masifique”, apunta Raúl.
La rotura del emisario, que sigue sin solucionarse, o la falta de inversiones en la zona siguen siendo las principales reivindicaciones. “Hay señalizaciones que casi no se ven, postes en mitad de una acera, que te impiden circular…Bueno, estas cosas hacen que se plantee un Ayuntamiento propio”, señalan los vecinos.