El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Cartagena, Bartolomé Navarro, ha pedido "perdón" tras los insultos que pronunció un 'speaker' que condujo la cucaña que se celebró el pasado viernes, 15 de agosto, por la festividad de la Virgen del Mar. Según cita el diario La Verdad, el pescador profirió insultos hacia el presidente del Gobierno y dedicó mensajes racistas y homófobos.
"Lo siento muchísimo. Os prometo que no volverá a ocurrir", declaraba en un vídeo el presidente de la cofradía, que calificó los hechos como "muy graves". Navarro pide "perdón" y ofrece "todas" sus disculpas "a toda la gente que estuvo en la cucaña". Asegura que el pescador a cargo de dirigir con el micrófono el acto de "ese día tan especial" para ellos "no tuvo una reacción correcta". "No tiene nada que ver con los criterios míos ni de la cofradía ni del sector al que represento", señala.
"Eligió el peor camino"
En un comunicado más extenso, la cofradía asegura que lo ocurrido "merece una seria reflexión": "La persona que, con un micrófono en la mano, hablaba en nombre de la Cofradía de Pescadores, eligió el peor camino: convertir una celebración popular en un escenario de insultos, comentarios sexófobos y ataques gratuitos al Gobierno. Quien se expresa de esa manera no solo falta al respeto a las instituciones, sino que ensucia la imagen de toda la Cofradía y ofende a la ciudadanía que espera de nosotros responsabilidad y ejemplaridad", lamentan.
Sostienen que no esas palabras "no" le respresentan: "Queremos ser claros: esas palabras no nos representan. No forman parte de los valores de la pesca ni de la tradición marinera de Cartagena. La Cofradía es un espacio de trabajo, de respeto y de servicio a la comunidad, y no puede quedar manchada por actitudes que avergüenzan a todos".
Y anuncian que asumirán "responsabilidades": "Desde la Cofradía estudiaremos qué medidas tomar para que en ninguna jornada futura alguien con un micrófono vuelva a manchar con insultos y vulgaridad lo que debería ser fiesta, unión y orgullo colectivo. Nuestro compromiso es firme: mantener viva la tradición, pero siempre desde el respeto, la igualdad y la dignidad", zanjan.