El submarino S-82, denominado Narciso Monturiol, ha sido bautizado en lo que representa un gran hito histórico para la Armada y, por ende, para Navantia. La ceremonia, que se ha desarrollado en las instalaciones de la factoría cartagenera con la presencia de la ministra de Defensa, Margarita Robles, además del presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, el delegado de gobierno, Francisco Lucas, la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, y la secretaria de Estado directora del CNI, Esperanza Casteleiro y la alcaldesa de la ciudad, Noelia Arroyo, el Almirante General Teodoro López Calderón; el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), Almirante General Antonio Piñeiro Sánchez; y el director de Operaciones y Negocios de Navantia, Gonzalo Mateo-Guerrero, entre otros, ha sido un acto solemne junto al taller en el que se ha construido el submarino, días antes de que se inicie el proceso por el que éste se trasladará al agua mediante un dique inundable. El evento, que incluyó bendición y palabras de agradecimiento a trabajadores, dotación y autoridades, marca un paso decisivo en la modernización tecnológica de la Armada y en el impulso de la industria naval española.
De este modo, el S-82 estará listo para comenzar sus pruebas de puerto y, posteriormente, las pruebas de mar, que incluyen navegación en superficie e inmersión hasta alcanzar la cota máxima, confirmando así el avance del programa S-80, un proyecto fundamental para la defensa española y para su soberanía industrial y tecnológica.
Margarita Robles expresó un profundo agradecimiento a todos los trabajadores de Navantia, recordando el esfuerzo y la dedicación que han hecho posible que este submarino sea hoy una realidad. “Sois una parte muy importante de la historia de la Armada. Nunca os lo agradeceremos suficiente”, afirmó.
La ministra también reconoció el compromiso de la dotación de quilla del submarino, que durante años ha esperado con ilusión y confianza para afrontar los retos de este nuevo buque. “Vais a portar un trozo de Cartagena en vuestro corazón cada vez que surquéis los mares”, señaló.
Margarita Robles, ministra de Defensa: “No podemos entender la Armada sin Cartagena, ni Cartagena sin la Armada. Toda la Región de Murcia también está ligada a este proyecto”
Robles destacó la relación inseparable entre la Armada y la ciudad: “No podemos entender la Armada sin Cartagena, ni Cartagena sin la Armada. Toda la Región de Murcia también está ligada a este proyecto”.
La ministra aprovechó la ocasión para ensalzar a la Armada Española como ejemplo de profesionalidad, eficacia y entrega en todo el mundo. “En cualquier rincón del planeta donde España tiene necesidad, ahí están nuestros hombres y mujeres, dejando alto el pabellón español. Son historia, presente y futuro”, subrayó.
Finalmente, Robles recordó que la construcción del S-82 representa la continuidad de un camino de éxito y trabajo conjunto: “Todos estamos llamados a hacer grande nuestra Armada Española, a fortalecer Murcia y su región y, sobre todo, a contribuir al futuro de España”.
Por su parte, el Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada, Antonio Piñeiro, destacó en su intervención el valor estratégico y tecnológico del programa S-80 para la Armada y para España. “Este acto marca un hito histórico, no solo para la Armada, sino para toda la industria nacional de defensa”, afirmó, recordando que el proyecto ha colocado a Cartagena y a su tejido industrial en la cima de la innovación naval.
El almirante puso en valor la participación de Navantia, de las empresas colaboradoras y del personal de la Armada en la construcción y puesta a flote del submarino. También agradeció a la madrina de la ceremonia, Isabel, por su apoyo y dedicación al mundo naval.
Piñeiro señaló que el S-82, al igual que su predecesor, el submarino Isaac Peral, enfrentará un exigente periodo de pruebas antes de incorporarse plenamente a la flota. Subrayó la importancia del arma submarina como elemento disuasorio, discreto y letal, y recordó que la dotación del Narciso Monturiol asumirá una gran responsabilidad como parte de la evolución tecnológica del arma submarina española.
“Cartagena estará siempre ligada al arma submarina y al corazón de la Armada”, concluyó Piñeiro, recordando que la ciudad aporta un pedacito de su esencia a cada submarino que surca los mares, y confiando en la protección de la Virgen del Carmen para la seguridad de las dotaciones.
El director de negocios de submarinos de Navantia, Agustín Álvarez, agradeció la presencia de autoridades, trabajadores y colaboradores en la ceremonia de bautizo del submarino S-82 ‘Narciso Monturiol’, segunda unidad de la serie S-80 construida para la Armada.
“Gracias por ser partícipes de este hito tan importante para nosotros”, señaló Álvarez, destacando que España ha logrado un momento histórico al hacer realidad el programa de submarinos de la clase S-80, el mayor reto industrial y tecnológico afrontado por la industria de defensa nacional.
Tras años de trabajo y esfuerzo, el primer submarino ya ha sido entregado a la Armada y superado con éxito su calificación operativa. El S-82, explicó Álvarez, iniciará próximamente su exigente periodo de pruebas de puerto y mar antes de integrarse plenamente en la flota.
El directivo quiso reconocer el papel de todos los implicados: Navantia y su red de colaboradores, el Ministerio de Defensa, la Armada y especialmente los trabajadores del astillero de Cartagena, que con su compromiso y dedicación han hecho posible este proyecto.
“El S-80 es un éxito tecnológico e industrial, un éxito para Navantia y para España. Gracias a ello, tenemos un futuro prometedor por la proa y avanzamos con firmeza hacia la entrega del resto de submarinos de la serie”, concluyó Álvarez.
Empleo directo e indirecto para 6.000 personas
El programa de submarinos S-80 genera empleo directo, indirecto e inducido para más de 6.000 personas y un impacto anual en el PIB español (contribución directa, indirecta e inducida) superior a los 250 millones de euros, de los que más de 80 millones son aportación directa al PIB regional (el 1% del PIB de la Región de Murcia). Además, en él participan un centenar de empresas colaboradoras.
El segundo submarino de la serie S-80 lleva el nombre de Narciso Monturiol Estarriol, ingeniero, intelectual, político, pintor e inventor español, nacido en Figueres (Girona) en 1819. Es reconocido, junto a Cosme García Sáez e Isaac Peral como uno de los pioneros de la navegación submarina mundial.
El resultado de sus trabajos se recoge en su obra póstuma ‘Ensayo sobre el arte de navegar por debajo del agua’, editado en 1891. Fue el inventor del ‘Ictíneo’, un submarino que fue botado en Barcelona en 1859. En septiembre de ese año, realizó una exhibición pública en la que consiguió que el submarino permaneciese sumergido durante más de dos horas, a 20 metros, y hacerlo volver a la superficie.
Los submarinos S-80 tienen una eslora total de 80,8 metros, un diámetro de 7,3 metros y un desplazamiento en inmersión de alrededor de 3.000 toneladas. Entre sus aportaciones tecnológicas destacan el sistema de combate y control de plataforma desarrollado por la unidad de negocio de Sistemas de Navantia, y un sistema de propulsión anaeróbico revolucionario que aporta gran sigilo en inmersión, denominado BEST-AIP. Este sistema de propulsión independiente de la atmósfera permitirá obtener energía eléctrica a partir de pilas de combustible que utilizan tecnología procedente del sector aeroespacial, a cualquier profundidad. Así, podrán permanecer semanas sin salir a cota periscópica, lo que mejorará su discreción, principal atributo de un submarino, lo que situará a los S-80 entre los submarinos convencionales (no nucleares) más avanzados del mundo.