MURCIA. Las nuevas reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura han causado una honda conmoción en la Región de Murcia. Los regantes murcianos, que ya arrastran un historial de ninguneos, sienten que se trata de la "puntilla" para "acabar con el regadío" en la cuenca del Segura, en palabras de Lucas Jiménez, el presidente del Scrats. La Comunidad también expresa su indignación ante un hecho que tacha de "sentencia de muerte" para los agricultores de la Región, en palabras de Fernando López Miras. Pero el Gobierno regional no quiere quedarse en declaraciones y movilizará todos los recursos para evitar que el plan se apruebe de forma definitiva y también acudirá a los tribunales.
"Lo vamos a recurrir todo, absolutamente todo, porque es una decisión política, no es una decisión basada en criterios técnicos", anunció el presidente murciano, confirmando que el Ejecutivo regional activará la vía de la Justicia. En realidad, supone abrir un nuevo frente en la guerra judicial que la Comunidad mantiene con el Ejecutivo central por el Trasvase. En 2023, cabe recordar, ya interpuso un recurso ante el Tribunal Supremo para frenar el plan de cuenca acordado ese año en lo que entonces se calificó como el "mayor ataque político" a la Región en décadas. No obstante, aquella medida cautelar solicitada fue desestimada meses después.
Estas son las nuevas reglas
Ahora el Ministerio desliza una propuesta que, en la práctica, implica el recorte de hasta un 40% de los envíos de agua hasta 2027, al estimar que los embalses de la cabecera del Tajo pueden destinar al Levante las siguientes cifras: 320 hectómetros cúbicos este año; 278 hm3 en 2026 y 193 hm3 en 2027.
Las nuevas reglas de explotación, asimismo, recortan de 27 a 24 los hectómetros cúbicos a trasvasar en el caso de que los embalses se encuentren en nivel 2. En el nivel 3, se pasa de los 20 actuales a 11 hm3 en 2025, a 10 hm3 en 2026 y a 9 hm3 en 2027. Además, para llegar a ese nivel 3 hay que estar en un acumulado de 550 o 600 hm3, frente a los 400 hm3 de ahora. En el caso del nivel 1, se mantienen los 60 hm3 actuales, pero se sube el umbral de las reservas de Entrepeñas y Buendía de los 1.300 hm3 vigentes hasta los 1.600 hm3.

- Lucas Jiménez, presidente del Scrats. -
- Foto: EFE/MARCIAL GUILLÉN
¿Cómo se traduce esta retahíla de cifras? Lucas, el líder del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, así lo explicaba en la rueda de prensa celebrada este miércoles: "Desaparece el nivel 3 desde prácticamente ya, desde el primer escalón de caudales ecológicos, para el regadío"; "se elevan las curvas de nivel 2 para que sea más difícil entrar en él", mientras que el nivel 1 "lo convierten en un sueño, en una quimera imposible de conseguir porque aumentan a 1.600 hectómetros cúbicos el almacenamiento necesario".
Para López Miras, "el recorte es de tal calado que no va a poder ser posible la agricultura en la Región en 2027" ya que "será inviable", opina, categórico, el mandatario. Y todo ello, como apunta el dirigente, en el momento con más reservas en la cabecera. "Tiene reservas históricas y es, en este momento de bonanza, en el que aprueban el recorte porque no obedece a un criterio técnico. Es una decisión política, sectaria e ideológica", insistía. "No podemos permitirlo. Esto es algo que va mucho más allá de la política, es la defensa de nuestra identidad, de nuestro presente y de nuestro futuro", añadió, reafirmando que "se ratifica" que el "Gobierno decía la verdad" al sostener que "iba a hacer un hachazo" mientras que, apostillaba, "el PSOE mentía".
La delicada posición del PSOE
El PSRM-PSOE está en el punto de mira, ya que Francisco Lucas, su nuevo líder, afirmó en su proclamación, en presencia de Pedro Sánchez, que el "Trasvase es irrenunciable". Ahora Los regantes esperan que "se comprometan" todos los diputados murcianos, alicantinos y almerienses. Ayer, en el día en que se conocían los planes del Miteco, la portavoz del partido, Isabel Gadea, aseguraba que harían "todo lo que sea necesario para blindar cada gota de agua que necesita la Región de Murcia” y aclaraba que "aún no se ha aprobado ningún cambio en las reglas del Tajo – Segura".
Es cierto. No se ha aprobado nada todavía. Pero el Ministerio desveló sus planes en la Comisión Central de Explotacón del Acueducto Tajo-Segura, donde se apoyó en el informe de conclusiones del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex). A juicio de Lucas, este trabajo tiene como objetivo "no molestar a la población del Levante en el abastecimiento, mantener el nivel del agua lo más elevado posible en Entrepeñas y Buendía para favorecer las actividades lúdicas y recreativas del alto Tajo y acabar con algo en lo que no creen, que es el regadío y la ganadería".
Page da las gracias
De hecho, el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García Page, valoraba que la propuesta "no esconde los datos de la realidad crítica que tene el Tajo". Para el manchego, el Trasvase "ha sido un enorme fracaso en los objetivos que perseguía" y daba las gracias por la "valentía" del Gobierno para "no disimular" los datos técnicos de la situación real del Tajo y que se hayan hecho públicos los documentos técnicos de la Confederación Hidrográfica que reflejan la situación del río.
Fecoam y Asaja ven una "catástrofe"
Una visión opuesta a la que tienen los murcianos, donde todos reaccionaron al unísono en la Región. Santiago Martínez, presidente de Fecoam (Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia), considera que la reducción de los envíos "aísla hídricamente" a la Región, y supondrá "la pérdida de miles de puestos de trabajo". Una "catástrofe",añadía, porque se suman del cierre de los acuíferos de la cuenca del Segura "sin ninguna alternativa", algo que convertirá a Murcia "en una región dormitorio".
Para Alfonso Gálvez (Asaja), es un "auténtico disparate" y un "nuevo atropello2, convencido de que el Ministerio quiere “acabar” con la agricultura del Levante español". En su opinión, "el Gobierno de España interpreta la Directiva marco del Agua de forma sesgada y es incapaz de dar soluciones razonables y equilibradas para atender las demandas de agua para todos los usos necesarios en el marco de la adecuada regulación del Dominio publico hidráulico conforme a la Constitución española".
Quien también se pronunció fue el diputado de Vox y expresidente de la Comunidad Alberto Garre, quien en su día rompió la disclipina de voto en una votación del Estatuto de Castilla-La Mancha que pedía el fin del Trasvase para 2015. En su opinión, es una medida "absolutamente antisocial" pero culpa a "PSOE y PP" de llevar a cabo una carrera de relevos para ir fastidiando" a los regantes. En un comunicado, Garre adujo que la expresidenta manchega María Dolores de Cospedal "ya quiso cerrar el trasvase en su día, y ahora Pedro Sánchez y sus súbditos regionales quieren cerrarlo al 50%".