Murcia, sin ir más lejos

MURCIA. En nuestra comunidad puedes encontrar cerca de un centro educativo por un euro un desayuno, una bebida energética, un bocadillo… pero no nos confundamos. No es el precio de la hostelería en general. ¿Entonces, esos locales pierden dinero? En absoluto, invierten en ganar adictos. Esas "gangas" están en locales concretos y con objetivos concretos: atraer a los jóvenes y a partir de sus visitas, familiarizarlos con el juego y las apuestas; de hecho, en algunos de ellos se dan bonos gratuitos de iniciación al juego.

Cuando leemos que estas cosas pasan, que son "normales" en nuestra región, inconscientemente pensamos que es algo que ocurre "en otros entornos". No pensamos que las adicciones que se incentivan desde ese tipo de locales pueden en algún momento afectar a alguien de nuestra familia, nuestros amigos, nuestro trabajo… hasta que ocurre.

"No podíamos intuir entonces el peligro que estas pequeñas apuestas entraña y lo deprisa que enganchan"

En los institutos el profesorado empezó hace unos años a ver la punta del iceberg cuando algún alumno o alumna hacía comentarios sin importancia y bromeaba sobre el hecho de "jugarse unos euros" o comentaban en clase que fulanito había vendido su videoconsola a un compañero para obtener unos euros (luego supimos que apostaba o que necesitaba pagar una deuda). No podíamos intuir entonces el peligro que estas pequeñas apuestas entraña y lo deprisa que enganchan. Hoy sabemos que el tema es preocupante y los datos lo confirman.

En nuestra región tenemos siete mil jóvenes diagnosticados como ludópatas y según el CES hay tres veces más locales de juego que la media de España. Somos campeones indiscutibles en eso.

Sabemos también que cambia el perfil de los adictos, que cada vez son más jóvenes y que muchos de ellos y ellas son ludópatas sin sustancias, es decir, adictos a videojuegos o apuestas online, y que todo eso sucede mientras muchas familias, sin intuir el peligro, están tranquilas y confiadas porque sus hijos están en casa, "entretenidos en su habitación".  

Así las cosas, AMPAS, Proyecto Hombre y otras organizaciones sociales se han puesto a trabajar para combatir esta enfermedad. El Consejo de administración de la Radiotelevisión autonómica ha pedido que se suprima la publicidad de casas de apuestas fuera de horario nocturno (somos la única TV autonómica que la emite en esos horarios) y la Consejería de Salud ha incluido en el Plan Regional de Adicciones la adicción a los videojuegos como enfermedad mental. 

Pero no aplaudan todavía por esta ofensiva de sociedad civil, Gobierno y ente televisivo contra las adicciones porque, a la vez, la Consejería de Hacienda dice que de suprimir patrocinios, nada, y la Consejería de Turismo aprueba bonificar las tasas sobre apuestas y máquinas recreativas para "salvar a la hostelería".  

Una cosa y su contraria desde el mismo Consejo de Gobierno.  

Región de Murcia, sin ir más lejos.

Rosa Peñalver Pérez. 

Docente. Jubilada.