Para celebrar el Día de la Persona Migrante, la entidad Movimiento por la Paz quiere visibilizar la relación directa que existe entre los procesos migratorios y los trastornos la salud mental en la mujer. Los abusos sexuales o de trata con fines de explotación sexual, que casi siempre recaen en mujeres, son la principal causa de problemas de salud mental en los procesos migratorios.
Movimiento por La Paz (MPL) es una entidad que trabaja desde 1983 en ayudar a mujeres en riesgo de exclusión social a superar y/o prevenir situaciones de discriminación y pone el énfasis en el acompañamiento e intervención con mujeres que sufren todo tipo de violencia en los procesos migratorios. Unos procesos y unas situación que desatan y desencadena problemas relacionados con la salud mental de las mismas.
Desde MPDL denuncian que los procesos migratorios tienen importantes consecuencias para la salud mental de las mujeres, debido a las experiencias de violencia, desarraigo y abusos, entre otros.
Según denuncia la psicóloga de la entidad, Mónica Rangel, psicóloga de Movimiento por la Paz, especializada en el tema de género y migrantes: "Muchas mujeres llegan a destino después de días, meses o incluso años de travesía y de exponerse a situaciones donde son agredidas y abusadas sexualmente de manera sistemática. Esto desencadena unos diagnósticos de estrés post traumático, depresión o ansiedad que necesitan apoyo psicológico, social y económico para salir de ello".
Por ello desde Movimiento por la Paz cuentan con el servicio de atención "Punto de Información y asesoramiento integral para la mujer víctima de violencia de género y/ o en riesgo de exclusión social", financiado por la Conselleria valenciana de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, donde facilitan el acompañamiento para la inclusión además de prestar información, apoyo y facilitar un espacio donde puedan expresar libremente sus inquietudes y buscar soluciones a las mismas. El centro ofrece atención social, jurídica y asesoramiento en materia de inserción laboral. Como complemento, desarrollan acciones socio educativas, campañas de sensibilización y acciones comunitarias.
A través de este programa se facilita un apoyo integral tanto a mujeres que por diversas circunstancias pueden verse sometidas a violencia de género, como a aquellas que van al servicio en demanda de equiparación de oportunidades y de integración social y laboral, solicitando una mejora de su bienestar social y de su calidad de vida.
Desde MPL aclaran que con una intervención correcta estos problemas de salud mental si que tienen cura; los trastornos depresivos son más complicado de resolver.
La atención personalizada y adaptada a las necesidades y ritmos de cada mujer permite dar una respuesta más adecuada a la situación planteada. Es le caso , por ejemplo, de Mayra que llegó a València de Colombia embarazada y con un hijo de 6 años de edad hace menos de dos años. Tuvo que salir con su familia de la noche a la mañana por las amenazas que recibía tanto ella como su esposo, alto cargo del cuerpo de policía en su país. Llegaron con los puesto y desde cero han tenido que empezar una nueva vida. El proceso migratorio y de maternidad se unieron en la vida de Mayra y ha necesitado ayuda psicológica especialmente en el servicio de atención de MPL, una ayuda que todavía sigue recibiendo y que le ha permitido salir adelante y estabilizarse con su nueva vida.
Desde MPL quieren recordar que el caso de Mayra no es único y que la migración internacional no es un fenómeno nuevo. No obstante, se observa un crecimiento de los flujos migratorios en las últimas décadas. Movimiento por la Paz publicó, en 2021, el estudio sobre Mujeres Africanas y Afrodescendientes en España. La investigación recoge las experiencias de discriminación de 320 mujeres de 38 nacionalidades y muestra que, en el ámbito de la salud, persisten obstáculos derivados de la falta de reconocimiento y valorización de otras culturas.
El racismo, la misoginia, la islamofobia y otras formas de discriminación también pueden causar un daño duradero al bienestar psicológico de las mujeres migrantes.
La desigualdad estructural, la precariedad de las condiciones laborales y el acceso a un área de trabajo específica como son el ámbito del hogar y de los cuidados, peor remunerada, conforman algunas de las circunstancias que acrecientan la vulnerabilidad de las mujeres inmigrantes, agravándose cuando se encuentran en situación administrativa irregular.
Pese a la existencia de tratados y convenios internacionales que protegen los Derechos Humanos en general, y también específicamente los de las personas migrantes, y los de las mujeres, MPL recuerda que este colectivo tiene múltiples dificultades y barreras para poder hacer efectivos esos derechos que deberían tener garantizados. Esta situación tiene su origen fundamentalmente en la violencia estructural, que produce indefensión jurídica, social y victimización secundaria.
No olvidemos que el contexto de la migración ya supone un agravio en situaciones de violencia, ya que implican generalmente una situación de mayor vulnerabilidad que afecta de manera directa a la mujer.
Desde el MPDL concluyen que, debido al género, el color de la piel, la religión y el estatus migratorio, muchas mujeres migradas en España experimentan violencias que se combinan y se interrelacionan, dando lugar a diferentes alteraciones en su salud mental. Por ello, a la hora de aplicar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, las administraciones públicas deben garantizar el acceso igualitario de las mujeres y niñas migrantes a la asistencia sanitaria, incluidos los recursos de salud mental.
La semana que viene… ¡más! Y Felices Fiestas…