MURCIA. El chef cartagenero Felipe Antonio Díaz Zamora, de 43 años, que trabajaba como cocinero en un restaurante de Tijuana (México) y que había estudiado en la Universidad Politécnica de Cartagena, fue encontrado muerto el pasado fin de semana con tres heridas de bala justo frente a la casa a la que planeaba mudarse con su familia, según informó en el fiscal especial de Delitos contra la Vida, Enrique Javier Sánchez Serrano, citado por el diario 'El Universal'.
El cuerpo fue encontrado en un camino, entre una valla metálica y un vehículo de tipo 'pick up', tumbado boca arriba y con tres heridas de bala, una en la cabeza y dos en la espina dorsal, todos disparados por la espalda.
La investigación no contempla que fuese asesinado por ser español o por su pertenencia al gremio de la hostelería, sino que vincula el crimen a sus relaciones personales, aunque el fiscal dejó claro que quieren analizar más indicios, entre ellos el análisis de que sea un asalto, sino más bien un asunto personal", ha señalado el fiscal, tal como recoge el diario.
El restaurante donde trabajaba, 'Vámonos de tapas', ha publicado en su página de Facebook mensajes de condolencias. "Lamento informarles de la terribles pérdida de nuestro gran chef, actor, cantante, bailador, gran amigo, compañero y sobre todo un buen esposo y gran papá Felipe Díaz siempre resolvía todo y nunca se quedó con los brazos cruzados luchó para seguir adelante y nunca dejó nada a medias. Como cocinero había participado en acciones filantrópicas y en 2018, junto a otros chefs, participó en la elaboración de una paella para 3.000 personas de la caravana migrante.