CARTAGENA. Un total de 41 estudiantes de diversos centros educativos han realizado sus prácticas en el complejo industrial de Repsol en Cartagena. Los jóvenes provienen del CIFP Politécnico, CIFP Carlos III, CIFP Hespérides, Salesianos, el IES Juan Carlos I, IES Sierra Minera, y la Universidad de Murcia de ramas tan diversas como los grados de química industrial, laboratorio de análisis y control de calidad, prevención de riesgos profesionales, administración y finanzas, sistemas informáticos o del máster de ingeniería química de la universidad de Murcia.
Durante su estancia en Repsol han tenido la oportunidad de aplicar los conocimientos adquiridos en las aulas, ampliar sus conocimientos, y tener un primer acercamiento al mundo laboral.
Lidia Peñalver empezó el grado de criminología, pero al no ser cómo ella imaginaba, decidió cambiar a química industrial en la modalidad FP Dual. En su opinión, realizar las prácticas en el complejo industrial de Cartagena ha sido una experiencia muy enriquecedora porque “cualquier persona que estudie química industrial querría ver cómo funciona realmente una planta y creo que no hay una mejor opción. Repsol es una de las mejores empresas en su ámbito y pensé que aquí podría formarme bien como operadora de área. Una de las cosas que más me ha sorprendido, una vez dentro, es que nunca dejas de aprender, siempre hay formación a la que asistir y así seguir actualizándote”, explica. Lidia se ha formado en el departamento de Tanques y Terminal donde ha podido realizar purgas de tanques, cambios de carga, desplazamientos de líneas o toma de muestras de productos para analizar en el laboratorio.
También Iván Rayos ha tenido la oportunidad de hacer sus prácticas de química industrial de FP Dual en las instalaciones de Repsol en Cartagena. “Para mí, después de 16 años y medio en las Fuerzas Armadas, ha supuesto una grandísima ilusión poder sentirme realizado en un puesto de trabajo como hacía tiempo que no me sentía. Estando en el área de Seguridad he podido realizar desde las tareas más simples de abrir y cerrar válvulas, hasta auditorias de permisos, toma de mediciones en campo, simulacros o mantenimientos en la zona asignada. Todo ha sido nuevo y a la vez muy interesante”.
Iván superó las pruebas de acceso a la universidad para mayores de 25 años en 2017, y unos años más tarde, después de hablar con familiares que trabajan en el sector energético y dejarse asesorar, decidió formarse en el CIFP Politécnico en la rama de química industrial para intentar optar a un puesto de trabajo en Repsol “por ser una empresa donde, por las referencias que me trasmitieron mis familiares, encontraría una familia más que un trabajo”.
Desde que en el año 2012 Repsol iniciara la colaboración con diferentes centros educativos para la formación del alumnado, han pasado por sus instalaciones 533 estudiantes, de los que 265 procedían de Formación en Centros de Trabajo (FCT), 151 de cursos de Operador de Planta Química, y 117 de Formación Profesional Dual. Precisamente, el complejo industrial de Cartagena fue la primera empresa de la Región en adherirse a esta modalidad educativa.
El director del complejo industrial de Repsol en Cartagena, Antonio Mestre, ha destacado que “el 70% de los estudiantes que realizan sus prácticas en la modalidad de FP Dual con nosotros, pasan a formar parte de nuestra bolsa de empleo”. Este dato, según Mestre, “es un indicador de la capacidad que tiene la industria para generar oportunidades entre los jóvenes y crear empleo de calidad”. Para el director de Repsol en Cartagena, “la formación profesional dual es un ejemplo de modelo formativo de éxito y de cómo, trabajando de manera conjunta el sistema educativo, las administraciones y las empresas, somos capaces de ofrecer a nuestros estudiantes una educación de calidad, garantizando formaciones orientadas a la realidad que nuestros jóvenes se van a encontrar cuando salgan al mercado laboral”.
Además del alumnado de FP Dual de las ramas de química industrial y laboratorio, por el complejo industrial de Cartagena también han pasado estudiantes de Formación Profesional, también conocida como FCT (Formación en Centros de Trabajo).
Jesús Morata y Héctor Ruiz, de 21 y 20 años respectivamente, han realizado el ciclo de FT Técnico Superior en Administración de Sistemas Informáticos en red. Esta formación les ha ofrecido las capacidades necesarias para ejercer su actividad en el área de informática de entidades que dispongan de sistemas para la gestión de datos e infraestructuras de redes. La formación práctica la han realizado en el departamento Tecnologías de la Información del complejo industrial de Repsol en Cartagena donde han tenido la oportunidad de poner en práctica las lecciones teóricas aprendidas en el aula, trabajando en la configuración de dispositivos o la transferencia de archivos.
“Elegí Repsol porque era la empresa donde pensé que más opciones de aprender tendría. Ha sido una muy buena oportunidad para poner en práctica lecciones que en el grado hemos visto solamente desde un punto de vista teórico. Es una experiencia muy recomendable que te prepara para el entorno laboral”, explica Jesús.
Para Héctor Ruiz, “en Repsol nos han enseñado desde cómo empezar en el ámbito laboral y relacionarnos con el resto de los compañeros, hasta utilizar aplicaciones digitales de colaboración empresarial o bases de datos. Cuando visitamos el centro de procesamiento de datos, los servidores o los cuartos de control nos quedamos como niños pequeños mirando todo porque nunca habíamos visto nada parecido”.
Repsol también cuenta con el programa Talent Energy dirigido a estudiantes de grado y máster que quieran desarrollarse en el sector energético. En la actualidad, dos jóvenes del máster de ingeniería química de la Universidad de Murcia están participando en este programa en Cartagena donde han tenido la oportunidad de conocer proyectos pioneros como la planta de combustibles renovables.
Lucía Sánchez ha realizado el grado de Ingeniería Química en la Universidad de Murcia y actualmente está cursando el máster en Ingeniería Química. Escogió hacer sus prácticas en el centro de Cartagena porque sabía que le proporcionarían una formación práctica de alta calidad y le permitiría enfrentar situaciones y desafíos reales de la industria, nos explica.
“Esta experiencia es una gran oportunidad para formarme como ingeniera química. Estoy en el departamento de Hidrotratamiento, he realizado tareas diversas, algunas de gestión documental y otras de mayor relevancia para mi formación como son revisiones de P&ID (diagramas de tuberías e instrumentación), soporte en procesos de gestión del cambio, control de inspecciones de seguridad y creación de informes”, comenta.
Samuel Nicolás también está cursando el máster en Ingeniería Química de la Universidad de Murcia, una titulación que en su día le pareció muy completa y puso como primera opción: “Hoy día sé que acerté”, explica. “Poder estar y ampliar conocimientos en una de las mayores empresas del sector, con proyectos pioneros orientados hacia la descarbonización y su política de constante cambio, no deja ningún margen de duda para querer estar aquí. Además, la situación que los jóvenes afrontamos para poder acceder a un primer empleo es bastante delicada. Oportunidades como esta no solo nos enriquecen a nivel académico, sino que nos dan una gran proyección en el mercado laboral por el peso que tiene Repsol”, comenta.
Para él, su paso por la compañía está siendo toda una aventura de crecimiento personal, estudiantil y laboral: “Para un graduado en Ingeniería Química poder estar en un complejo industrial como el de Repsol en Cartagena, donde todos los procesos fisicoquímicos que se llevan a cabo los has estudiado, es bastante gratificante. Pero, si a ello le sumas la calidad humana de los profesionales que aquí trabajan, el valor de esta beca crece significativamente”.
La amplia oferta de plazas para estudiantes en prácticas que ofrece Repsol forma parte del compromiso del complejo industrial con la sociedad para fomentar y facilitar la empleabilidad, siguiendo un esquema de aprendizaje experiencial en un entorno laboral real, que proporcione conocimientos y competencias que respondan a las demandas empresariales, a la vez que se propicia la inserción laboral gracias a una mayor interacción con el entorno empresarial.