MURCIA (EUROPA PRESS). El escritor Luis García Montero, quien publica Prometeo (Alfaguara) , ha reconocido que estos últimos meses, tras la muerte de su mujer Almudena Grandes, están suponiendo "una mala racha" aunque tiene "motivos para la resistencia".
"Tengo razones para resistir, dejar que pase el tiempo y buscar el cariño en los amigos y en la propia literatura de Almudena. Escribir también es una negociación con la vida, es una manera de analizar las cosa e intentar recuperar un sentido a la vida: el problema es que muchas veces el dolor acaba cortando cualquier sentido y te hace estar anestesiado", ha explicado el director del Instituto Cervantes.
García Montero ha recordado que las malas rachas "tienen que ver con la suerte" y así lo entiende en este momento. "La muerte de Almudena fue injusta, porque le llegó pronto, y una catástrofe para la familia. Además, poco después murió mi padre con 95 años, y Almudena siempre me decía la suerte que yo tenía de haber podido convivir tanto con él", ha apuntado.
Recién pasado el homenaje que recibió este pasado lunes en el Teatro Español la autora madrileña, García Montero ha explicado que fue algo "muy emotivo" el ver cómo la gente "formaba largas colas" horas antes de que empezara el acto. "Me emocionó mucho ver el cariño de la gente y la idea clara que tiene que estar en las instituciones, como el Ayuntamiento de Madrid: que nos representan a todos", ha apuntado.
El escritor granadino ha agradecido "tanto a los amigos" de Almudena Grandes como a la gente que acudió al teatro el que estuvieran "aplaudiendo y demostrando su cariño y respeto sin permitirse el más mínimo grito contra el alcalde o las personas que no quisieron acudir". "Sin un mal modo y defendiendo la alegría", ha celebrado.
Grandes había dejado terminado un libro que verá la luz a finales de este año y que llevará como título Todo va a mejorar. "Es una reflexión en tono de ciencia ficción sobre las posibles consecuencias políticas de la pandemia y los peligros de que el confinamiento derivara en un sistema casi de dictadura", ha señalado.
García Montero ha explicado que esta obra suponía un paréntesis en su proyecto de Episodios Nacionales -el otro se produjo en 2008 con la crisis y Los besos en el pan-, que finalmente quedará inconcluso con cinco títulos -el objetivo de Grandes era llegar a seis-.
"Ella pidió dársela a su editorial, Tusquets, y así lo hice. Está programada para octubre-noviembre, al año de su muerte, y eso me ha gustado mucho porque es una manera de respeto a la novela. Si hubiera salido inmediatamente se habría mezclado con estos actos, mientras que con distancia la novela tendrá la atención por sí misma", ha asegurado.
En cualquier caso, el director del Cervantes se ha mostrado "sorprendido" por estas masivas muestras de cariño a Grandes. "Era una mujer con muchos lectores y nosotros vivimos el cariño de la gente como una respuesta a lo que Almudena les dio. Pero no era previsible que tantos pueblos quisieran ponerle una calle, tantas bibliotecas su nombre y tanta gente nos haya acompañado desde el primer día", ha celebrado.
En Prometeo, García Montero recupera su obra escrita para el Festival de Teatro Clásico de Mérida, además de otras piezas que giran en torno al mito del titán. Una de las palabras que más relevancia alcanza en este libro es la 'empatría', una defensa diferente de la patria.
"Estamos viendo algunos casos de políticos españoles que tienen la palabra patria en la boca y luego salen por Europa o se acercan al norte de África y hacen declaraciones que pueden vivirse como verdaderas traiciones a los intereses de España. Hay una visión muy mezquina de la política y, frente a eso, me gusta la empatría", ha concluido