MURCIA. Arrancan las primeras protestas para exigir una mejora en las condiciones de los funcionarios de la Región. UGT y CCO se han concentrado esta mañana para mostrar su postura al Gobierno regional ante el Palacio de San Esteban "tras tantos años de recortes y de congelación de derechos", por lo que ahora esperará la respuesta del Gobierno de la Comunidad.
En cualquier caso, los sindicatos ya han anunciado que, de no cumplirse sus demandas, convocarán una huelga en la Administración Pública para el mes de febrero.
En específico, piden mejoras en la función pública, como la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales y la reversión de los "recortes" adoptados en 2011 y 2012 y de la paga extra eliminada en 2014.
El encuentro es fruto del malestar de sendos sindicatos por el acuerdo puntual adoptado por el Ejecutivo regional con el Sindicato Médico CESM y el Sindicato de Enfermería SATSE, que contempla, entre otras medidas, la ampliación de los módulos de tarde y el incremento del número de médicos en Atención Primaria.
Para UGT y CCOO, este acuerdo se adoptó de forma unilateral, sin tener en cuenta a los sindicatos con mayor representación en el colectivo de empleados públicos, y supone una "vulneración" tanto la Constitución Española, como las leyes que regulan la negociación sindical.
Ambos sindicatos ya se reunieron la pasada semana con el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, un encuentro en el que el Ejecutivo murciano se ha comprometido a convocar de forma urgente una mesa de negociación para abordar este asunto.