MURCIA (EP). Los líderes de la OTAN han acordado aportar un mínimo de 40.000 millones de euros anuales para Ucrania en 2025, una medida propuesta por el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, y han anunciado la creación de un mecanismo con el objetivo de coordinar tanto el apoyo como el entrenamiento militar para Kiev.
"A través de contribuciones proporcionales, los aliados pretenden proporcionar una financiación mínima de 40.000 millones de euros durante el próximo año y proporcionar niveles sostenibles de asistencia de seguridad para que Ucrania triunfe", reza un comunicado de los líderes de la OTAN.
El objetivo es contribuir a la creación de "una fuerza capaz de derrotar" a Rusia y "disuadirla" de nuevos conflictos en un futuro. "Los jefes de Estado y de Gobierno reevaluarán las contribuciones de los aliados en futuras cumbres de la OTAN", han sentenciado.
En concreto, el monto está relacionado con la adquisición de equipo militar; gastos de mantenimiento, logística y transporte; gastos por el adiestramiento militar, así como inversiones en la infraestructura de defensa ucraniana.
Asimismo, han subrayado que apoyan "plenamente el derecho de Ucrania a elegir sus propios acuerdos de seguridad y decidir su propio futuro, libre de interferencias externas". "El futuro de Ucrania está en la OTAN", han agregado.
Los líderes han reiterado que seguirán apoyando a Kiev "en su camino irreversible hacia la plena integración euroatlántica, incluyendo la membresía en la OTAN". "Reafirmamos que estaremos en condiciones de extender una invitación a Ucrania para unirse a la Alianza cuando los aliados estén de acuerdo y se cumplan las condiciones", han resaltado, en alusión al proceso de reformas basado en méritos que debe afrontar el país.
Los líderes de la OTAN han reafirmado su "compromiso inquebrantable con Ucrania como Estado soberano, democrático e independiente". "La invasión a gran escala de Ucrania por Rusia ha destrozado la paz y la estabilidad en la zona euroatlántica y ha socavado gravemente la seguridad mundial", han sentenciado.
Por otro lado, han anunciado la creación de la llamada Asistencia de Seguridad y Entrenamiento (NSATU, por sus siglas en inglés) para coordinar el suministro de equipo militar y de entrenamiento para Kiev por parte de los aliados y los socios.
En la misma línea, han comunicado que se establecerá un Centro Integrado de Ciberdefensa a fin de "mejorar la protección de la red, el conocimiento de la situación y la implementación del ciberespacio como dominio operativo en tiempos de paz, crisis y conflictos".
En otro punto, también se han comprometido a "fortalecer la protección de la infraestructura submarina crítica", mientras que han asegurado que invertirán en "capacidades de defensa química, biológica, radiológica y nuclear".
En el comunicado los líderes también han celebrado que más de dos tercios de los aliados "hayan cumplido con su compromiso de gastar al menos el 2 por ciento del PIB anual en defensa". "Reafirmamos que, en muchos casos, será necesario un gasto superior al 2 por ciento del PIB para remediar las deficiencias existentes", han indicado.
Menciones
La declaración incluye una mención a Bielorrusia, que sigue consintiendo el uso de su territorio e infraestructura para la guerra en Ucrania. "La profundización de Rusia en la integración política y militar de Bielorrusia, incluyendo el despliegue de capacidades y personal militar, tiene implicaciones negativas para la estabilidad regional y la defensa de la Alianza", han argüido.
Por otro lado, los líderes de la Alianza han señalado que "las acciones desestabilizadores de Irán afectan a la seguridad euroatlántica", mientras que "las ambiciones declaradas y las políticas coercitivas" de China siguen desafiando los intereses, la seguridad y los valores de la OTAN".
"La asociación estratégica cada vez más profunda entre Rusia y la República Popular China y sus intentos de socavar y remodelar el orden internacional basado en normas, que se refuerzan mutuamente, son motivo de profunda preocupación", han aseverado.
Pekín aparece en dos de los puntos de la declaración definida como un "desafío sistémico a la seguridad euroatlántica". "China no puede hacer posible la guerra más grande en Europa en la historia reciente sin que esto afecte negativamente a sus intereses y su reputación", han sentenciado.
"Instamos a la República Popular China, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, con la responsabilidad particular de defender los propósitos y principios de la Carta de la ONU, a que cese todo apoyo material y político al esfuerzo bélico de Rusia", han recalcado.
Los líderes de la OTAN también han dejado claro que tanto Corea del Norte como Irán "alimentan" la guerra de Ucrania "proporcionando apoyo militar directo a Rusia, como municiones y drones", lo que "afecta gravemente a la seguridad euroatlántica y socava el régimen de no proliferación".
"Condenamos enérgicamente las exportaciones de proyectiles de artillería y misiles balísticos de Corea del Norte, que violan numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, y observamos con gran preocupación la profundización de los vínculos entre Corea del Norte y Rusia", han agregado.
De la misma forma, los líderes de la Alianza, que celebra su 75 aniversario, han puesto el foco en las "amenazas híbridas, cibernéticas, espaciales y de otro tipo", así como en las "actividades maliciosas de actores estatales y no estatales", con mención en este sentido a Pekín.