LOS ALCÁZARES. Tanto la Semana Santa como el día de la Región, último puente antes del verano, dejaron muy buenas sensaciones entre los chiringuitos del Mar Menor. A pesar de la inflación, ya por encima del 10%, los hosteleros del Mar Menor esperan que este 2022 sea el de la recuperación, una vez eliminadas las restricciones de la pandemia y renacidas las ganas de la sociedad por recuperar el tiempo perdido. "Hasta ahora lo que más hemos tenido es turismo extranjero. Residentes nacionales pocos. Ahora que ya ha terminado el colegio esperamos que poco a poco se llene esto. Esperamos un buen verano", señalan desde el chiringuito el Galeón, en Los Narejos.
Una de las tendencias en algunas zonas del Mar Menor es enfocar el negocio al tardeo ante la menor afluencia de gente para las horas de baño. "Aquí la mayoría abre todo el día. Si alguno cierra en un momento determinado del día, suele ser por la noche. Lo que sí es verdad es que las tardes suelen estar llenas de gente", cuentan desde el Chiringuito La Sirena. "El tardeo y la noche están muy bien. Hay gente que opta por ir a bañarse a algunas zonas del mar Mediterráneo y por la tarde o la noche ya se animan a tomar algo por los chiringuitos de esta zona", señalan desde el Chiringuito Los Narejos.
Pese a la delicada situación del Mar Menor, todos los dueños de chiringuitos señalan que este será uno de los mejores veranos de los últimos años. "El Mar Menor no está tan mal como se dice. Es cierto que, en algunos puntos concretos, la ausencia de corrientes provoca que las algas muertas se queden y se genera esa suciedad. Sin embargo, en general diría que está bien. En mi zona, el agua está como hacía tiempo que no estaba", señalan desde el Chiringuito Los Narejos. "El verano ha empezado muy bien. Este pasado puente de la Región he vendido 31 barriles de cervezas y 50 cajas de quintos. Ha empezado todo fenomenal. Esperamos un buen verano", añade. "Algunos prefieren bañarse en el Mar Mediterráneo. Las noticias en torno al Mar Menor nos han afectado", señalan desde el Chiringuito Rosario.
Aunque las perspectivas son buenas, lamentan los hosteleros que la subida de precios que necesitarían ante el aumento de los costes no la pueden llevar a cabo. "Algunos llevamos con los mismos precios 10 años. Ahora tendríamos que subir los precios, pero aguantaremos. Esperamos que compense", cuenta el responsable del Chiringuito La Sirena.