MURCIA. Animales de todo tipo y tamaño han invadido la Cárcel Vieja de Murcia. Se suben por las paredes, cuelgan de las escaleras, forman grupos, no pierden de vista a los visitantes... Se trata de una invasión en toda regla contra la que no hay control de plagas que valga; no hay nada que hacer porque no se puede frenar la impetuosa creatividad del artista murciano Ismael Cerezo, más conocido como Flyppy, creador de este universo de fantasía, luz y color habitado por "bichos" de hierro y cristal.
"¿Qué cómo estoy? Pues, reventado pero muy contento", aseguraba el artista mientras ultimaba el montaje de la muestra que este viernes, a las 19.00 horas, se inaugura en el Centro de Cultura Contemporánea de Murcia (dependiente de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Murcia). Y es que la muestra Animales es fruto de casi un año de trabajo, durante el cual Flyppy ha creado 185 piezas expresamente para la que es la exposición más grande y ambiciosa de su trayectoria. Para articularla en un espacio expositivo que no es fácil, pero ofrece muchas posibilidades, han contado con Isabel del Moral como comisaria.
Se le nota a Flyppy orgulloso de sus criaturas, algunas de tamaño XXL, como dicé él, y a las que se refiere utilizando términos como "este pedazo de animal" o "las succionadoras". Todas ellas han sido realizadas en su taller -situado en una antigua herrería del barrio del Progreso- desde 2022, habiendo acabado la última hace una semana. Todas están a la venta, excepto la escultura de un perro que data de 1990, propiedad del propio Ismael Cerezo, que sirve para contextualizar a este inquieto creador. De hecho, y aunque sea obra reciente, Flyppy señala que esta gran exposición -que ocupa las dos plantas (y todos los rincones) del centro de arte- muestra cómo ha sido su evolución.
Esta exposición, además de ser la mayor que ha llevado de forma individual Flyppy, cuenta con una teatralización en la que tiene mucho que ver Isabel del Moral, quien destaca que se ha neutralizado todo lo que se ha podido la luz tan blanca de un espacio donde los animales forman escenas. Así por ejemplo, en la planta de arriba, en una de las salas, interactúan "perros y gatos" mientras un buho luminoso los vigila a todos. Aquí también hay representada un ciudad a base de pilares bajos, a la altura de los niños que visiten la muestra, con más gatos en sus tejados. Porque esta es una exposición ideal para que los más pequeños puedan disfrutar de este universo fantástico, recuerda la comisaria.
Otro aspecto a destacar es que se ha utilizado cristal reciclado del artista para crear fondos y acompañar a las esculturas. También se aprovecha la luz natural que entra por la ventanas para jugar con el color de los cristales. Además, se proyectarán unos audiovisuales de Álvaro Rabadán consistentes en mostrar cómo es un día en el taller de Flyppy. Toda una esperiencia.
