MURCIA. Ubicado en el barrio de La Viña, en la calle Panadería, Lorca tiene un nuevo juzgado, el octavo de la Ciudad del Sol. La Administración de Justicia regional suma desde este lunes un nuevo juzgado de Primera Instancia e Instrucción, el número 8 en el partido judicial de Lorca. La creación de este órgano, junto con el de Primera Instancia número 19 de Murcia, fue aprobada en noviembre de 2022 por el Consejo de Ministros en el Real Decreto de nuevas unidades judiciales correspondiente a la programación 2023, pero su puesta en funcionamiento fue diferida al 31 de marzo de 2024, tras el acondicionamiento del local cedido por el Ayuntamiento de Lorca.
Al respecto, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJMU), Miguel Pasqual del Riquelme, ha manifestado que esta espera no será necesaria cuando Lorca cuente con la nueva sede judicial "acorde con su dimensión socioeconómica y su historia". El nuevo Palacio de Justicia, en el centro histórico y con un coste de más de 17 millones, reunirá en una sola sede todos los órganos judiciales, acabando con la dispersión actual. “Es una obra imprescindible, que llevamos décadas reclamando y que no puede retrasarse más”.
Pasqual del Riquelme no ha ocultado su satisfacción por la puesta en marcha del octavo juzgado para el partido judicial. "Supone el primero de los pasos importantes que hay que dar para convertir a Lorca en uno de los núcleos judiciales sobre los que ha de pivotar la Administración de Justicia Regional, junto a Murcia y Cartagena". Señaló después, además de la puesta en marcha de la nueva sede judicial, la separación de jurisdicciones civil y penal y la comarcalización de la violencia de género con la creación de un juzgado especializado, como metas a corto plazo, para un adecuado despliegue territorial de la justicia.
No obstante, ha apuntado que la creación de este juzgado "aun siendo bienvenido, está muy lejos de cubrir las necesidades judiciales identificadas por nuestra Sala de Gobierno, lo que nos sigue dejando por debajo de la media nacional en número de jueces”. Y ha recordado que la Sala de Gobierno del TSJMU reclamó un mínimo de 11 unidades judiciales en su último informe de planta, y el Ministerio de Justicia sólo ha acordado la creación de una (una plaza de magistrado) para 2024.
El nuevo órgano, dos locales colindantes habilitados como unidad funcional en el barrio de La Viña, con una superficie de 515 metros cuadrados, dispone de una amplia oficina judicial, zona de archivos, sala de comparecencias, sala de vistas propia, además de los despachos para juez o jueza, fiscal y letrado o letrada de la Administración de Justicia. Además, cuenta con una zona de espera de detenidos y otros espacios adicionales.
En representación de abogados y procuradores de Lorca, también han asistido los decanos de ambos colegios profesionales, Elisa Campoy-López Perea y Nieves Cuartero Alonso, respectivamente.
Tras la constitución del juzgado, del que se ha hecho cargo de forma provisional la jueza sustituta Marta García Martínez y el letrado de la Administración de Justicia, José Bautista Martínez Tafalla, han tomado posesión los 7 funcionarios, dos gestores, cuatro tramitadores y una auxilio judicial, nombrados en comisión de servicio, así como los interinos que desde hoy desarrollan su función en el nuevo órgano judicial.
Estos, han estado acompañados de otros miembros de la carrera judicial, fiscal y letrados de la Administración de Justicia del partido judicial.
"Las obras de adecuación, terminadas en diciembre, ejecutadas mediante programas de formación de la Concejalía de Empleo y Desarrollo Local, se han llevado a cabo con un proyecto con empresas colaboradoras y suministradoras", expuso el alcalde. La reparación y adecuación del local ha consistido básicamente, ha detallado, en la redistribución de sus dependencias e instalaciones para el uso al que se destinarán. "Hemos conseguido, en tiempo récord y con un coste de poco más de 100.000 euros, poner a disposición del Ministerio de Justicia estas instalaciones modélicas".
Al llevarlas a cabo con personal propio de programas de Empleo, los costes se han rebajado de forma importante. Los trabajos han permitido adaptar el local de casi 500 metros cuadrados para acoger: una antesala de control, distribuidor, sala de declaraciones, oficios, sala de vistas, aseo público y de funcionarios, distribuidor de funcionarios, espera de testigo, oficina judicial, despacho del juez, despacho del letrado, entrada de funcionarios, almacén, espera de detenidos, aseo de detenidos, una sala de uso múltiples y archivo.
Las obras, ha aportado, han consistido en "demoliciones, fontanería y saneamiento, cerramientos y divisiones, pavimentos y revestimientos, carpinterías metálicas y de madera, instalación de electricidad y domótica, telecomunicaciones e informática, vigilancia y cámaras de televisión e instalación de protección contra incendios".
Y ha recordado que "no es la primera vez que un juzgado sale del entorno del casco antiguo de la Ciudad, ya que el número 4 y 7 permanecieron largo tiempo en unos locales del barrio de San Cristóbal", a la vez que ha señalado que la nueva sede provisional “permitirá la separación de las jurisdicciones Civil y Penal, hasta la finalización de las obras del Palacio de Justicia que se construye en la calle Selgas".
Las nuevas dependencias del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 8 son "fruto del esfuerzo de este equipo de Gobierno, porque cuando llegamos a la Alcaldía únicamente había continuos anuncios de la implantación de un nuevo juzgado. No había local, ni proyecto de obras y mucho menos presupuesto. Hemos conseguido, en tiempo récord, poner a disposición del Ministerio de Justicia estas instalaciones modélicas", concluía.