MURCIA. La ciudad de Murcia acogerá la próxima semana una cumbre de los presidentes autonómicos de la Región y la Comunidad Valenciana, Fernando López Miras y Carlos Mazón, para remarcar su causa común en defensa del agua, en tiempos de sequía, con "graves problemas hídricos" y con un Trasvase Tajo-Segura que arrastra los coletazos del recorte aprobado el año pasado. Todavía no ha trascendido el lugar ni la fecha concreta, pero este diario ha podido confirmar que el encuentro entre ambos mandatarios autonómicos se desarrollará en la capital del Segura la próxima semana, con la vista puesta, además, en el 22 de marzo, que es el Día Mundial del Agua.
Los dos barones, líderes del PP en sus respectivos territorios, ya compartieron impresiones el pasado fin de semana en Córdoba, donde mantuvieron una reunión con el resto de presidentes autonómicos del PP, presidida por su líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, para abordar las líneas estratégicas en asuntos clave del país. Además, López Miras y Mazón siempre han presumido de buena sintonía entre ambos. No en vano, los dos dirigentes mantuvieron varios encuentros institucionales en la pasada legislatura, cuando Mazón presidía la Diputación de Alicante. Y recientemente coparon el primer plano de la política nacional tras el breve pero sonado encuentro en Fitur junto con el presidente andaluz, Juanma Moreno, y su homólogo manchego, Emiliano García-Page.
Miras y Mazón están unidos por una lista de reivindicaciones comunes, como son la financiación autonómica, el agua e incluso su oposición al Ejecutivo socialista de Pedro Sánchez. La cita de la próxima semana será la primera cumbre institucional entre los dos jefes de Gobierno. El agua es un tema de máxima urgencia para ambas cancillerías; máxime en una cuenca del Segura que atraviesa días críticos. Precisamente este lunes la Confederación Hidrográfica del Segura declaraba la situación excepcional por sequía extraordinaria en la Unidad Territorial (UTE) 1 Principal (de la que dependen las zonas regables de las Vegas Alta, Media y Baja) tras constatar a principios de mes el estado de la cuenca del Segura.
A ello se une la controversia por el recorte a los envíos de agua procedentes del Tajo. Hay que recordar que en 2023 la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana (entonces con un Gobierno de otro signo político), junto con Andalucía, emprendieron una batalla judicial tras conocerse la aprobación de la planificación hidrológica. Aquel plan, vigente hasta 2027, levantó al Sureste Español ante lo que consideraban un golpe mortal" al Trasvase Tajo-Segura. Las tres comunidades interpusieron sendos recursos por la vía contencioso-administrativa, porque sostienen que en un lustro pueden sufrir una merma de los envíos de agua del Tajo al Segura en una horquilla de 70 a 110 hectómetros cúbicos.
El Gobierno murciano, de hecho, solicitó la pasada semana la revisión de las reglas de explotación, para "no basarlas en los actuales caudales ecológicos fijados en el Plan del Tajo", ya que todavía están pendiente los recursos judiciales. Así lo trasladó el director general murciano del Agua, José Sandoval, en una reunión en Madrid, en la sede del Ministerio para la Transición Ecológica. El encuentro, sin embargo, se saldó con un resultado "decepcionante" para el Ejecutivo murciano. La próxima semana, Murcia y Valencia volverán alzar la voz por el agua.