MADRID (EP). El presidente del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, se plantea dimitir para forzar la renovación del órgano de gobierno de los jueces, según ha admitido en conversaciones con la prensa tras el acto de apertura del año judicial.
El magistrado ha asegurado que está dispuesto a dimitir pero ha subrayado que, de momento, no es una decisión tomada, sino una opción. Ha precisado, además, que no dejaría el cargo hasta que las negociaciones en el Consejo estén encaminadas a un acuerdo para nombrar a los dos magistrados del Tribunal Constitucional que le corresponden.
De dimitir le sustituiría en el CGPJ el vocal más antiguo, que sería Rafael Mozo. En el caso del Tribunal Supremo asumiría su cargo el magistrado más antiguo, el presidente de la Sala Primera, Francisco Marín.
Este mismo miércoles, en el marco de su discurso de apertura del año judicial, Lesmes descartó la posibilidad de una "renuncia colectiva" de los vocales y del presidente del Consejo y reprochó a quienes insinúan que de no hacerse se estaría poniendo de manifiesto un comportamiento "poco responsable". Señaló, sin embargo, que una renuncia individual sí sería "admisible".
Foto: TRIBUNAL SUPREMO
Lesmes preside el CGPJ desde 2013. Su mandato caducó a finales de 2018, pero la imposibilidad de los partidos con mayor representación en las Cortes ha conllevado a que permanezca desde entonces en el cargo en funciones.
El también presidente del Supremo ha insistido en que de producirse su salida, sería una vez encaminadas las conversaciones entre los vocales del CGPJ para llegar a un consenso sobre los dos magistrados que el Consejo debe designar al Constitucional antes del 13 de septiembre.
Aunque aún no está claro que los vocales alcancen un acuerdo antes del plazo fijado por la ley, ha asegurado que confía en que no sea más allá de septiembre. Está previsto que mañana jueves el Pleno del Consejo se reúna con el objetivo de designar a los dos magistrados del TC. Lesmes ha incidido en que cree que el encuentro irá "bien" y permitirá fijar las normas para la negociación.
Justo la noche del martes, los vocales más críticos insistieron en un cónclave que era necesario establecer las "reglas de juego", es decir, fijar el procedimiento interno para llevar a cabo estos dos nombramientos antes de llegar a un acuerdo, según señalaron a esta agencia fuentes presentes en el encuentro.
Lesmes también ha asegurado que una vez que los vocales le trasladen que hay una posibilidad de acuerdo claro convocará otro Pleno extraordinario para abordar el asunto.