MURCIA. El 73% de las compraventas de segunda mano que se hacen en la Región de Murcia se tramitan a través de una agencia inmobiliaria, según recoge la XVII edición del Barómetro Inmobiliario 'El sentimiento de mercado de los profesionales inmobiliarios', realizado por UCI (entidad especialista en financiación sostenible). De esta forma, la Región de Murcia es, junto a Castilla-La Mancha, la segunda comunidad autónoma con mayor penetración de la intermediación inmobiliaria, tras Galicia (76%).
También a nivel nacional los profesionales inmobiliarios siguen liderando en España las operaciones de compraventa de viviendas de segunda mano, con una cuota de mercado del 63%. "A pesar de caer un punto con respecto al análisis realizado en 2021 (64%), la cuota de mercado de los agentes se mantiene en los niveles más altos de la historia, lo que refleja la profesionalización del sector en detrimento de las transacciones realizadas entre particulares", recoge el informe.
En cuanto a la presencia de los profesionales inmobiliarios por comunidades autónomas, Galicia (76%), Castilla-La Mancha y Murcia (73%) son las autonomías con mayor penetración de la intermediación inmobiliaria. En el lado opuesto, se sitúan Extremadura (49%), La Rioja (55%) y Navarra (57%).
Un buen dato para las agencias inmobiliarias en un momento en el que el ciudadano tiene cada vez más dificultades para encontrar vivienda. La desproporción entre la oferta y la demanda ha llevado a un aumento constante en los precios de la vivienda, lo que dificulta que las familias accedan a una vivienda adecuada.
"El mercado está estable a pesar de todo lo que está sucediendo a su alrededor, especialmente el de obra nueva. Como hay falta de oferta, hay mucha más demanda y eso da estabilidad al mercado. Lo que no quiere decir que sea deseable que se esté construyendo tan poco", apuntaba desde los promotores inmobiliarios de la Región, su presidente, José Ramón Blázquez, hace unas semanas. "Hay una falta importante de suelo urbanizable. Llegar a ese momento es complicado, hay excesiva legislación y burocracia", señalaba Blázquez. "La vivienda ahora mismo cuesta mucho edificarla y los impuestos son muy altos. Tenemos un problema evidente de vivienda asequible", añade. "El Estado tiene mucha responsabilidad. Debemos quitar costes del proceso, porque la vivienda no soporta tanto coste. Hay que conseguir que sea más asequible", afirmaba. "La vivienda no está teniéndose en cuenta en los presupuestos, y otros sectores, como el del automóvil sí. Se dan ayudas para vehículos más eficientes. Se pide lo mismo para la vivienda, pero no hay ayudas para el comprador. La vivienda debe estar en el foco de la acción política. Es un bien de muy primera necesidad".
