MURCIA. Comprar una vivienda en la Región sigue siendo algo complicado si observamos la evolución de los precios. Según datos de Idealista del mes de marzo, el metro cuadrado en la Región se sitúa en los 1.130 euros, un 5,9% más que hace un año. Sin embargo, respecto a febrero la variación es solo de medio punto porcentual, lo que abre la esperanza a una bajada de los precios en los próximos meses.
El municipio más barato de la Región es Bullas, con 453 euros el metro cuadrado, seguido de Yecla, Alguazas y Cehegín, que registra 557, 577 y 579 euros el metro cuadrado respectivamente. En el otro extremo, las zonas más caras para comprar una vivienda se encuentran en la costa, con La Manga (1.657 euros el metro cuadrado), San Javier (1.464 euros), Mazarrón y Los Alcázares (1.333 euros) o San Pedro del Pinatar (1.252 euros) muy por encima de la media de la Región.
Unos precios que siguen dificultando, salvo excepciones, el acceso a la vivienda. La falta de suelo es otro de los retos a los que se enfrenta el sector. Por primera vez en muchos años, en 2022 el número de viviendas acabadas es superior a las iniciadas, lo que indica un problema evidente de oferta que empuja los precios al alza, dificultando el acceso a la vivienda de muchos sectores de población. Entre estos sectores la población joven es la principal perjudicada.
"Debemos poner en marcha medidas para facilitar el acceso a este sector de población, que es el más demandante de vivienda, ya que son los jóvenes los que suelen lanzarse a la compra de vivienda para empezar su proyecto de vida", manifestó el consejero de Fomento, José Ramón Díez de Revenga, en la última feria RESIDE.
Un problema que se mantendrá en el tiempo, al menos durante este año. Los precios seguirán subiendo durante 2023 aunque todos los actores del sector confían en que esta subida se vaya moderando con el paso de los meses. "La demanda crece mucho más rápido que la oferta de vivienda, lo que produce un estrés en el mercado que provoca un aumento de los precios", aclaran desde APIRM. Pese a estos retos, la venta de vivienda goza de buena salud. La vivienda como activo sigue al alza pese a la escasez de la misma.
La falta de suelo es uno de los retos a los que se enfrenta el sector. Según informan desde Apir, la patronal de promotores inmobiliarios de la Región, el número de viviendas acabadas es superior a las iniciadas, lo que muestra un problema de oferta que empuja los precios al alza, dificultando el acceso a la vivienda de muchos sectores de población. Entre estos sectores la población joven es la principal perjudicada. "Sigue habiendo más demanda que oferta", apuntan desde las inmobiliarias. "Apenas se ha construido en los últimos años. Esto afecta especialmente a la gente joven, que se tiene que ir a localizaciones más periféricas para poder encontrar una vivienda que puedan afrontar", añaden.
Sin embargo, el ciudadano de la Región sigue considerando un valor seguro la propiedad inmobiliaria. Un 73,4% de los ciudadanos de la Región vive en una vivienda en propiedad, mientras que el 18,3% lo hace en una vivienda alquilada. La estructura de tenencia de la Región de Murcia se muestra similar a la del conjunto del país, que cuenta con un 69,5% de ciudadanos con viviendas en propiedad y un 19% con viviendas alquiladas, según datos del Centro de Investigaciones Sociológicas. La propiedad de una vivienda requiere de estabilidad económica, como muestra que el perfil de aquellos que viven en una vivienda de su propiedad es, principalmente, el de personas mayores de 30 años, siendo los mayores de 65 años la que cuenta con un mayor número de propietarios (85,6%). Por el contrario, aquellos que afirman residir en una vivienda alquilada son principalmente jóvenes, que suelen tener un menor nivel de renta y una mayor inestabilidad laboral.