Tras darse por finalizado el ‘estado de alarma’, entramos progresivamente en la mal llamada "nueva normalidad".
Con esta aparente ‘nueva situación’ resulta que leo, veo y escucho cosas que me crean un cierto desasosiego unas y estupor e indignación otras...
Tras haber aumentado, con el Gobierno actual, en más de 37.000 millones de euros la ya insostenible ‘macro deuda’ del Estado español, observamos estupefactos cómo siguen despilfarrando, ‘en nimiedades estrafalarias’, el dinero público.
Sorpresa e indignación produce observar cómo han ‘tuneado con el arco iris’ furgonetas de reparto de Correos, buzones y la fachada de la sede oficial de éste organismo en Chueca, a la vez que se ordena emitir un millón de sellos con el logo del arco iris, símbolo del colectivo LGTBI, para complacer a Irene Montero y conmemorar "el día del orgullo gay", el 28-J.
- ¡Jó, tía... qué ocurrencia! ¿No?
Y yo me pregunto ¿Cómo pueden estigmatizar de esta manera un Servicio Oficial del Estado, asociándolo de forma ilegal, a un colectivo de carácter sectario que sólo representa a una mínima parte de la sociedad?
¿Cuánto le ha costado este ‘caprichito’ al erario público?
Pero la cosa no queda ahí con este ‘singular Ministerio’ de Irene Montero...
Al parecer, ha creado una “Oficina de seguimiento para denunciar la publicidad sexista” con un número de teléfono gratuito, que le cuesta al erario público más de 500.000 euros (14 empleadas para cubrir las 24 horas de consultas telefónicas).
- ¡Jó, tía, qué pasada! ¿No?
¿No serviría para esto el teléfono 016 destinado a las denuncias por violencia de género?
Ocurre esto en un país en donde, actualmente, cientos de familias comen a diario gracias a Cáritas y otros ‘organismos extra oficiales’ apoyados por las congregaciones parroquiales y religiosas, tan denostadas por este Gobierno progre que calla vergonzosamente esta cruda realidad.
Y es que como dijo Vargas Llosa: "Me indigna el doble discurso de obligar a vivir a los demás en las penurias socialistas, mientras ellos saborean las mieles del capitalismo".
¿Verdad, señor Iglesias y señora Montero?
También leo con sorpresa y estupor cómo la concejala de Podemos responsable de Justicia Social, Feminismo y LGTBI del Ayuntamiento de Palma, Sonia Vivas (Policía Local en excelencia) remite un tuit ‘pidiendo que derriben la estatua del franciscano español y mallorquín Fray Junípero Serra (1713-1784) por que lo consideran un ‘racista y un genocida de los indígenas’.
Este fraile franciscano, doctor en filosofía y teología, fue beatificado por Juan Pablo II en 1988 y canonizado por el Papa Francisco en 2015, por su labor encomiable de evangelización, actuando siempre en defensa de pueblos indígenas de América, como le han reconocido en el The Hispanic Council, quienes afirman: "Lejos de ser un genocida o un racista, representó a lo largo de su vida todo lo contrario".
La incultura histórica y el odio recalcitrante al Catolicismo provoca en algunos ‘pseudo políticos’ reacciones exentas de lógica y de sentido común.
Y mientras tanto seguimos expectantes ante las actuaciones y declaraciones de los políticos que cada vez parecen estar más cerca de la construcción de una ‘Torre de Babel’ (Biblia: Génesis:Capítulo 10).
* Sánchez saca pecho: "Hemos salvado 450.000 vidas con el confinamiento y el estado de alarma". ¿De dónde saca esto?
Obvia que somos los primeros en número de muertos por cien mil habitantes y tenemos la mayor tasa de sanitarios contagiados.
* Simón, en su línea: "Los viajeros no son un riesgo si no tienen el virus". ¡Estaría bueno!
* Yolanda Díaz: "Investigad la exclavitud laboral y prácticas ilegales en los trabajadores del campo". ¡Haciendo amigos en las Asociaciones Agrarias!
* Calvo: "No descartamos que se pueda volver a decretar el estado de alarma parcial o total en caso necesario". ¿?
* María Jesús Montero: "Bajo ningún concepto el Gobierno se ha planteado volver a decretar el estado de alarma ni parcial ni total". ¡Lo dijo horas después!
* Illa: "Los rebrotes de los nuevos casos no son preocupantes".
¡Esto, dicho por Illa, sí que puede ser preocupante!
Es evidente que, aún dentro del mismísimo Gobierno, están castigados, como en Babel, a hablar distintos idiomas...
Y para finalizar les diré que yo SÍ estoy preocupado por los rebrotes que, en parte, son debidos a factores varios:
* Comportamiento irresponsable.
* Falta de control policial urbano.
* Falta de medidas de control en aeropuertos, puertos y estaciones. ¡Esto es muy grave!
* Falta de control sanitario en la entrada de pateras que siguen proliferando por el buen tiempo.
Estamos con los colegios, los institutos y las universidades cerradas y los bares llenos de gente joven sin mascarillas...
¿Alguien lo entiende? ¡Yo no!
José Manuel García Albarrán es médico jubilado
