MURCIA. La Comunidad Autónoma de la Región de Murcia ha activado este domingo su red de vigilancia fija contra incendios forestales dentro de la Época de Peligro Medio marcada en el Plan Infomur, al que la Consejería de Medio Ambiente contribuye con el grueso de efectivos de detección y extinción.
Los puntos de vigilancia o malla ECO están distribuidos en puntos estratégicos desde donde, en conjunto, se obtiene visibilidad de toda la Región. Está compuesta por 20 infraestructuras que estarán activas hasta el 15 de octubre, diariamente, con un total de tres personas por puesto.
Además de formación sobre prevención de riesgos laborales, comunicaciones, detección de humos y cartografía, el personal que compone esta red está inmerso en la obtención del certificado de profesionalidad en operaciones de vigilancia y extinción de incendios forestales y apoyo a contingencias en el medio natural y rural supervisado por el Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF).
"Los vigilantes de incendios forestales detectan humos con ayuda de unos prismáticos direccionales que llevan incorporados una brújula para dar la localización exacta de la columna de humo. Además, se les facilita cartografía de la zona de cobertura para que puedan localizar con mayor exactitud el incendio y para ofrecer también una mayor información, siendo su mayor valor el conocimiento práctico del territorio que vigilan", indicó la directora general de Medio Natural, María Cruz Ferreira.
Una vez detectado y localizado el incendio, se transmite el hecho al Centro de Coordinación Operativa de la Región de Murcia (CECOP) a través del sistema de radiocomunicaciones regional (Radiecarm) con red TETRA (Terrestrial Trunked Radio).
Además de la labor de detección de incendios en la Región, el personal de vigilancia es fundamental en el momento de verificar columnas de humo, posibles conatos u otros que sean transmitidos por los ciudadanos al teléfono de emergencias 112, de modo que la movilización de recursos y la respuesta a la posible emergencia sea la correcta.
Del mismo modo, son imprescindibles para orientar al personal de extinción en el mejor modo de acceder hasta la zona del conato o del incendio, dirigiéndolos por los caminos más rápidos para ello.
Se encuentran en contacto con los Agentes Medioambientales para advertirles de posibles quemas agrícolas ilegales e incluso advertir de posibles movimientos crepusculares y nocturnos en los montes que pudieran tener naturaleza ilegal como furtivismo, acampadas ilegales u otros.
La Dirección General de Medio Natural finalizó el año pasado las obras de las instalaciones de El Almirez (Lorca) y Los Gavilanes (Yecla), y durante 2023 se iniciarán las obras de infraestructuras de vigilancia en La Castellana (Lorca) y La Pila (Fortuna).