CARTAGENA. La dirección general de Patrimonio Cultural de la Consejería de Cultura ha autorizado las obras de remodelación de la Plaza de la Merced en Cartagena, que supondrán la peatonalización de todo el área para ampliar las zonas de uso público, según informaron fuentes municipales en un comunicado.
La Plaza de la Merced, conocida como el Lago, se encuentra dentro del entorno de protección del Palacio de Aguirre, que está declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento, y por este motivo era necesario el visto bueno de la dirección general de Patrimonio Cultural para llevar a cabo el proyecto de renovación de esta área.
El proyecto de remodelación de este espacio contempla la supresión del tráfico rodado, la eliminación de las plazas de aparcamiento de la ORA y la creación de nuevas zonas peatonales en los que se compatibilizará el uso social, con la instalación de juegos infantiles, deportivos y de mayores, con el respeto de la vegetación histórica existente y la recuperación de los restos arqueológicos. "La Plaza de la Merced es una de las zonas más castizas de nuestro centro histórico y requería de una remodelación integral", ha explicado la vicealcaldesa y concejala de Patrimonio, Ana Belén Castejón.
Para llevarla a cabo, ha explicado que "realizamos un proceso participativo, para que vecinos, instituciones y colectivos sociales y empresariales nos explicaran qué querían". "Atendiendo a sus propuestas, hemos proyectado una transformación urbana relevante que nos permitirá dar vida a este espacio mientras acometemos las excavaciones arqueológicas para recuperar los tesoros que se esconden en el subsuelo", según Castejón, quien ha precisado que los elementos que se instalarán serán "temporales y reversibles".
El pavimento de la calzada se va a elevar y se instalará mobiliario urbano básico y reutilizable que permita actividades intergeneracionales tanto estáticas (bancos y mesas) como dinámicas (deporte urbano, gerontogimnasia y juegos infantiles); una valla que facilitará la visualización de los trabajos arqueológicos desde varios puntos específicos; y maceteros en los que se plantarán desde arbustos hasta árboles. Además, las cuatro palmeras históricas de este espacio se trasplantarán a consecuencia de la excavación arqueológica.
El presupuesto de las obras ronda los 250.000 euros y se llevarán a cabo con cargo al capítulo de inversiones de la empresa concesionaria del agua. De forma paralela a estas obras, se está preparando el proyecto para la excavación de los restos arqueológicos, según ha explicado Ana Belén Castejón.
En la parte norte de la plaza existe un tramo de calzada de 31 metros de longitud y 6 metros de anchura, perteneciente al decumano máximo de la ciudad romana. En la zona meridional, existe un importante conjunto hidráulico romano integrado por una piscina y una fuente monumental, provisto de un ábside en su fachada con un estanque a sus pies.
En este mismo sector, pero a una cota inferior, se conserva una casa púnica con signos de destrucción violenta que identificamos con el momento de conquista de la ciudad púnica (Qart Hadasht), por las tropas romanas. "Se trata de un patrimonio que debemos recuperar y exponer al público para seguir enriqueciendo nuestra oferta turística y cultural", ha explicado Castejón.