CARTAGENA. Un grupo de voluntarios se pusieron en marcha este viernes en la playa de Levante de Cabo de Palos para recoger las colillas tiradas por el arenal frente a la Reserva Marítima Islas Hormigas.
A simple vista se pueden confundir con la arena, pero sí están, ahí estaban y los voluntarios recogieron cientos de ellas en una acción que puso en marcha la Cofradía de Pescadores de Cartagena y que ha sido confinanciada por el Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca y la CARM y apoyado por Galpemur.
El sector pesquero artesanal a través de la Cofradía de Pescadores de Cartagena, lleva años destinando recursos y esfuerzos por mantener la Reserva Marina de Cabo de Palos-Islas Hormigas como un ejemplo de sostenibilidad medioambiental. Para ello se realizan acciones de vigilancia y control, evitando la pesca furtiva. Gracias a ello la Reserva Marina está siendo una referencia para el sector del buceo a nivel internacional.
“Ha sido un éxito, tanto la convocatoria como la acción que hemos puesto en marcha”, decía el presidente de la Cofradía de Pescadores, Bartolomé Navarro, quien decía que no es difícil de entender el mensaje ‘Soy una playa, no un cenicero’, aunque ahora falta que la gente lo resepete y lo ponga en practica.
Los voluntarios recogieron cientos de colillas, además de otros residuos que dejan los bañistas en la playa y repartieron conos para que el arenal, al menos este viernes, quedara limpio.
Las colillas no se quedan en la playa, el viento las lleva al mar, y pueden tardar 10 años en desaparecer del ecosistema. A día de hoy contaminan los océanos tanto o igual que los plásticos.