CARTAGENA. La instalación solar fotovoltaica instalada en noviembre del año pasado en la planta de tratamiento y eliminación de residuos de El Gorguel, que gestiona la empresa concesionaria Lhicarsa, ha supuesto la reducción de 15 toneladas de emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
Con la puesta en marcha de las placas fotovoltaicas de generación de energía eléctrica, destinada principalmente al autoconsumo, la concesionaria pretende minimizar el impacto ambiental del servicio de tratamiento de residuos urbanos consumiendo energía de generación propia procedente de una fuente de origen renovable, como es la energía solar.
La instalación se ha ubicado sobre la cubierta de la nave de recepción de residuos sólidos urbanos y se compone de 254 módulos solares fotovoltaicos de 500 W, lo que supone un total de 127 kilowatios de potencia instalada. Ha supuesto una inversión superior a 90.000 euros, asumida íntegramente por Lhicarsa.
Durante los tres primeros meses completos en servicio, esto es, diciembre, enero y febrero, los más desfavorables para este tipo de instalaciones por falta de horas de sol, se ha conseguido generar más de 20.700 kilowatios hora, de los que se ha autoconsumido el 90% y el resto se han vertido a la red. Asimismo se ha conseguido evitar las emisiones de 14.519 kg de dióxido de carbono a la atmósfera.