El sector palidece con continuas cancelaciones de eventos que lo hacen reiniciarse una y otra vez
MURCIA. No hay banda musical que no haya visto sus planes modificados a lo largo de este año. La industria musical, en situación crítica desde marzo, proclama la Alerta Roja. Hasta 25.000 conciertos se han suspendido y se calcula que las salas de conciertos han perdido 120 millones de euros en este 2020. Ante un clima tan adverso, Isaac Vivero, presidente de la Asociación de Salas de conciertos de la Región de Murcia, y Rafa Gómez, fundador de Silbato Producciones, aportan su visión a Murcia Plaza sobre el panorama actual.
"Es un auténtico sindiós, de psiquiatra... no hay horizonte ni parámetros para marcarnos objetivos claros. Es todo un: bueno, vamos adelante, pero...", contaba Gómez. Como gran parte del sector musical, los promotores se encuentran exhaustos. "La única manera que tiene el sector de salir adelante es con un plan de rescate por parte de las diferentes administraciones", recalcaba Vivero. En la actualidad los promotores y dueños de salas se ven abocados a reestructurar la organización de los conciertos con las medidas sanitarias actuales y la distancia de seguridad, y todo ello sin tener la seguridad de si se podrá realizar ese evento.
"no soy nada optimista a corto plazo, mis esperanzas están puestas en el mes de septiembre de 2021. Antes del verano lo veo complicado"
Plataformas como El Último Concierto, que este 18 de noviembre planea realizar en 60 salas nacionales conciertos-protesta sin público y en streaming, tratan de dar visibilidad a estos espacios culturales cuyo futuro a corto-medio plazo resulta temeroso. "No se ha sumado ninguna sala de Murcia, aunque si estamos dándole visibilidad y apoyándolo. En la Región de Murcia las salas de conciertos llevan cerradas desde el mes de marzo, pero en junio, septiembre y octubre se han hecho conciertos en live streaming con el apoyo de la Consejería de Cultura. Mientras nos queden fuerzas seguiremos en la pelea, pero fuerzas ya quedan pocas." Vivero, dueño además del Garaje Beat Club, reconocía también que "no soy nada optimista a corto plazo, mis esperanzas están puestas en el mes de septiembre de 2021. Antes del verano lo veo complicado."
Tanto Gómez como Vivero han vivido experiencias de aplazamientos constantes de eventos, llegando incluso a mover la fecha tres veces o más. "Yo ya he aplazado o cancelado más de 150 eventos. La maquinaria no se puede parar. La moral va bajando cuando un mismo evento lo tienes que aplazar por tercera vez, pero seguimos, no queda otra", confesaba Vivero. Gómez, por su parte, añadía: "Creo que después de un segundo aplazamiento, un tercero no tiene sentido... ya vendría la fecha de un año atrás, el disco ya no sería reciente, la gira no tendría un denominador común...". Pero no pierden la esperanza: "mientras el corazón siga bombeando, hay que seguir en la pelea", recordaba Vivero.
Los conciertos por streaming han sido la gran alternativa a muchas giras de bandas que se han visto afectadas por la pandemia. Los promotores lo ven como una alternativa a la hora de ofrecer conciertos y llegar a más gente. "El live-streaming ha llegado para quedarse, pero como un complemento al público presencial, nunca como un sustituto. Siempre y cuando se realice con la tecnología adecuada para poder ofrecer la suficiente calidad al mínimo coste, puede ser una vía de negocio futura, pero la base de todo es el público presencial, sin eso no hay ningún futuro posible", según Vivero.
"El live-streaming ha llegado para quedarse, pero como complemento al público presencial"
Los promotores siguen contando con el factor público como elemento principal, y el de la retransmisión online como uno secundario. En el caso de reinventarse, el proceso pasa por ahí. "No nos queda otra que reinventarnos y buscar recintos y aforos acordes a la situación de cada momento....tener en marcha el plan B, el D, el E... y así hasta la Z. Habrá que currar doble o triple para ganar la mitad, eso sí hay que tenerlo claro". Vivero, respecto a esto afirmaba que "las reducciones de aforo con distanciamiento social que hoy se establecen no son en ningún caso viables desde el punto de vista económico".
Murcia se ha caracterizado desde siempre por ser una de las mayores canteras de grupos de todo el país. El gran número de salas, festivales, concursos... da un inmenso abanico de oportunidades a bandas noveles de estrenarse prácticamente al momento de ser fundadas. Pero si la situación sanitaria no da pie a dar escaparate a los nuevos talentos de la Región, puede dar lugar a una brecha en la producción de nuevos artistas en los próximos años. Gómez lo reconocía: "es una de las cosas que más me preocupa, el cómo será... los chavales que andan empezando, los locales de ensayo, los garitos de siempre para ir fogueándose... tiene que ser muy complicado y frustante."
Rafa Gómez, quien además organiza el Microsonidos bajo el nombre de Silbato Producciones, avanzaba cómo será el futuro del proyecto que reúne a todo el circuito de salas de Murcia: "Microsonidos se adaptará y saldrá fortalecido, es un concepto ideado para el formato pequeño. El bicho no podrá con nosotros".
Pese a lo negro que se pueda ver todo a día de hoy, la industria musical siempre guarda en sí un foco de luz, y por muy pequeño que sea a veces, se aferran a él como su último salvavidas. Como dice Vivero, "todo el mundo está muy tocado, tanto anímica como económicamente, pero la creatividad de los artistas está ahí, y es muy probable que esta situación tan complicada que nos ha tocado vivir a todos se traduzca en un buen número de composiciones musicales sencillamente geniales en el corto y medio plazo. Las mentes privilegiadas de los artistas no han parado de trabajar, y con estas vivencias tan inusuales tienen mucha materia prima con la que crear". Confiaremos en salvar las salas, máximos exponentes y criaderos de grupos para volver a bailar cuando se pueda en las pistas de la Región.