CARTAGENA. La Concejalía de Comercio del Ayuntamiento de Cartagena ha puesto en marcha el proceso de consulta pública para modificar la ordenanza reguladora de la venta ambulante o no sedentaria en el municipio. Tras ocho años en vigor, se ha detectado la necesidad de actualizar la normativa para mejorar la competitividad y sostenibilidad del comercio ambulante, con el objetivo de adaptarlo a las demandas actuales de comerciantes y consumidores.
Entre las novedades más destacadas de la modificación se incluye una regulación más clara de los mercadillos benéficos y ocasionales vinculados a eventos deportivos, culturales y festivos. Este tipo de mercadillos, que hasta ahora estaban insuficientemente desarrollados en la ordenanza, tendrán una normativa más precisa que garantice su correcto funcionamiento.
Otro aspecto novedoso es la inclusión de los "food trucks". La futura normativa contemplará los espacios habilitados para estos vehículos de comida, así como los requisitos higiénico-sanitarios y de seguridad que deberán cumplir. Este sector ha crecido de manera significativa en los últimos años, lo que ha hecho necesaria su regulación para integrarlo dentro de la oferta comercial del municipio.
La revisión del texto también busca solucionar varios problemas detectados en la normativa vigente. El primero de ellos es la agilización de los trámites administrativos para la concesión de licencias y autorizaciones, un proceso que actualmente genera demoras y cargas burocráticas tanto para comerciantes como para la administración. Con la nueva normativa, se pretende reducir estas barreras, ofreciendo mayor transparencia y celeridad en los procedimientos.
Otro punto que se pretende abordar es la mejora en la convivencia entre vendedores ambulantes y los comercios fijos, una cuestión que ha generado conflictos en algunos momentos. La modificación buscará fomentar un equilibrio entre ambas modalidades de comercio, asegurando que ambas puedan coexistir en armonía, beneficiando tanto a los comerciantes como a los consumidores.
La concejalía considera que la revisión de la ordenanza es no solo necesaria, sino también oportuna, dado que el panorama socioeconómico ha cambiado en los últimos años. La actualización permitirá integrar de manera eficiente las nuevas actividades comerciales en el modelo económico del municipio, al igual que cierto tipo de regulación en algunas de los sectores, como el de la ropa usada asegurando que Cartagena siga siendo un referente en la venta ambulante, pero bajo un marco más moderno y eficiente.
Con esta consulta pública, se abre la puerta a la participación de las asociaciones de comerciantes y de los ciudadanos interesados en mejorar el sector, dotándolos de mayor seguridad jurídica y adaptando la ordenanza a las necesidades actuales de la ciudad.
Entre los objetivos de esta modificación destaca el fomento de una mayor integración entre las nuevas actividades económicas y las ya existentes, buscando que el comercio ambulante siga siendo un motor de cohesión social y proximidad. También se establece como prioritario un nuevo enfoque en los procedimientos administrativos para la concesión de licencias, que permita un comercio más dinámico y accesible.