MURCIA. Puede que sea una de las personas que mejor conoce la obra de Francisco de Goya, aunque ella reparte el mérito con los profesionales con los que ha trabajado como conservadora del Museo del Prado. Manuela Mena vino a Murcia para hablar sobre el genial artista con motivo del ciclo de actividades que se ha organizado a raíz de la exposición del retrato de Isidoro Máiquez en el Museo de Bellas Artes de Murcia (MUBAM), donde se podrá contemplar hasta el 17 de noviembre. Conversamos con ella antes de la conferencia y, entre otras cosas, nos asegura que el pintor de Fuendetodos fue "un feminista puro, casi como Voltaire" y que "la mujer fue uno de sus temas principales".
"Era un hombre enormemente cálido, protector de su familia y amigos", afirma Manuela Mena, quien se refiere al pintor con tanta cercanía, admiración y cariño que da la impresión de que es un amigo querido. No obstante, reconoce que "llegar hasta el fondo de una persona no es fácil; es difícil saber si conocemos verdaderamente a Goya".
- Se puede ser muy bueno, pero la genialidad sólo la alcanzan unos pocos. ¿Cómo la definiría usted en el caso de Francisco de Goya?
Para empezar, estamos hablando de una inteligencia superior. Goya se tuvo que dedicar al arte, pero hubiese podido ser un filósofo o un escritor si hubiera nacido en Alemania. No obstante, su camino estuvo bastante marcado por su familia, ya que su padre era dorador. Su genialidad reside en haber presentado de una forma nueva, original y distinta -que todavía nos sirve hoy en día- al ser humano en todo su conjunto, desde lo peor que tenemos hasta lo mejor.
- ¿Cuál fue la principal inquietud que plasmó Goya en su obra ?
Es de esos artistas que enfocó su vida en el ser humano. Los artistas generalmente se dedican a una cosa a lo largo de su vida, les interesa algo muy concreto, y a Goya le interesó saber quiénes somos nosotros; por qué actuamos como lo hacemos; por qué existe la maldad y la violencia extrema, y la bondad y la ingenuidad extrema. Desde muy joven se dedicó a estudiar al ser humano en cualquier cosa que se le pusiera por delante. Hasta el final de sus días.
- ¿Cuándo consigue el artista desprenderse de las imposiciones de la época?
Goya tuvo que trabajar, como lo hacían los artistas de la época, para el rey y la iglesia, que eran los máximos patronos del arte de la época y también para la más alta aristocracia. Para ellos, tuvo que hacer lo que le pedían, fundamentalmente retratos, cartones de tapices y pintura religiosa. El Goya más independiente que empieza a trabajar de una forma más libre comienza a finales del siglo XVIII, cuando se va soltando de todo aquello que estaba haciendo y tiene momentos en los que cree que puede salir adelante sin necesidad de la clientela. Esta independencia se refleja en la serie de dibujos y en las estampas, que las hace porque quiere y elige los temas que quiere. Aunque no le sale del todo bien y tiene que volver a trabajar para la clientela.
- ¿Cómo se refleja esa libertad en su obra? ¿Sobre qué temas busca investigar?
En esos dibujos únicos, en los que investiga sobre lo que le interesa a su alrededor. La mujer, por ejemplo, es uno de sus temas principales. Es un feminista puro, casi como Voltaire, en un momento muy temprano de valoración de la mujer. También ve la parte negativa, la parte en la que ella tiene que venderse porque no hay otra solución. Igualmente, empieza a trabajar sobre la maldad de otras figuras, de los hombres que las venden; sobre la violencia. Para él, la guerra contra Napoléon, como se llamaba entonces, es un momento que debió ser vitalmente terrible, porque significaba abandonar los ideales de la ilustración, pensar que no había regeneración para el ser humanos y que aquello que estaba viendo con sus ojos -la muerte, la desesperación, el hambre- iban a seguir allí para siempre.
- ¿La modernidad de Goya es reconocida por los artistas más contemporáneos?
Es uno de los artistas que todavía interesa, lo que hizo todavía tiene interés para los artistas que están trabajando ahora mismo, incluso para los más avanzados y modernos. Y eso significa que Goya tuvo visiones artísticas que están en la base más profunda de nuestra cabeza y que todavía se pueden utilizar. Es un artista moderno en el sentido de que todavía nos interesa lo que hizo, pero su sentido de composición es clásico, es un artista absolutamente del XVIII. Hay aspectos que pueden entenderse como más modernos, sobre todo al final de su vida, en lo que ahora nos parece una libertad técnica que podía ser resultado de su rapidez al pintar, de no tener la capacidad que tenía al principio de perfección absoluta. Hay una forma de pintar abstracta y rápida al final de su vida que está más cercana a nuestra sensibilidad actual.
lo que hizo todavía tiene interés para los artistas que están trabajando ahora mismo, incluso para los más avanzados y modernos
- Todos los pintores de la época cobraban por pintar las manos, pero en el caso de Goya se ha escuchado que evitaba hacerlo por la dificultad que entrañaba. ¿Realidad o leyenda?
Era más virtuoso que otros pintores. Lo de que no quería pintar manos son leyendas que no tienen el menor sentido. A todos los artistas se les pagaba las manos aparte. No podemos obviar que era un artista académico, era profesor de Anatomía de la Academia de San Fernando y corregía a los alumnos. Tenía que saber pintar perfectamente manos y pies. Y lo hace. Eso se ha dicho, sobre todo, basándose en cuadros que a lo mejor no son de Goya y en los que se ven cosas distintas. Pero cuando vemos ese expresionismo en las manos en obras como el 2 de Mayo, lo que vemos es una fuerza impresionante, conseguida con muy pocos elementos; en ese momento casi nadie lo logra hacer. La perfección del dibujo, la perfección técnica es impresionante, y como prepara sus lienzos y sus tablas,... No había nadie como él.
- ¿Cómo aconseja acercarse a la obra de Francisco de Goya?
Nunca se conoce suficientemente bien la obra de un artista de estas dimensiones. Cada generación tiene el derecho de interpretar y conocer las obras de los grandes artistas de acuerdo con sus propias necesidades. A lo mejor ahora interesan otras cosas. Tenemos derecho a seguir investigando, descubriendo e interpretando las cosas de la forma más actual.
- Qué destacaría del retrato del actor cartagenero Isidoro Máiquez que se expone estos días en el MUBAM?
Es un reflejo de un momento en el que la figura del actor tiene un peso importante en la sociedad, un papel que ya no pertenece sólo a los aristócratas. Isidoro Máiquez vivió en Italia, tuvo muchas vivencias y debió ser una persona muy, muy interesante. Y así lo ve Goya.
La exposición De gira por España consiste en el préstamo de una pintura de especial relevancia por un período de un mes a diferentes museos elegidos entre los mejores del país. A raíz de la exposición en el Museo de Bellas Artes de Murcia del retrato realizado por Goya a Isidoro Máiquez y del 250 aniversario del nacimiento del actor cartagenero que tuvo lugar el pasado año, se ha organizado una programación cultural que contribuya a profundizar en la figura del actor y del pintor. La próxima cita es este sábado en la Filmoteca Regional, a las 19.30 horas, con la proyección de la película Goya en Burdeos, de Carlos Saura (1999), que será presentada por la historiadora del Arte Isabel Durante.
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