MURCIA. El Consejo de Gobierno, a propuesta de la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes, ha aprobado el Decreto por el que se acuerda la declaración de Bien de Interés Cultural, con categoría de Sitio Histórico, del conjunto etnográfico, minero y arqueológico de la ladera meridional de la Sierra de Orihuela, en el término municipal de Santomera.
El paraje de la Solana de la Sierra de Orihuela es un espacio de aproximadamente 90 hectáreas que alberga unos valores de gran relevancia que se extienden en un marco cronológico que abarca desde la prehistoria hasta la actualidad.
A la hora de determinar la zona como Bien de Interés Cultural se han tenido en cuenta varios factores. En primer lugar su situación geográfica, pues la Solana de la Sierra de Orihuela es la intersección entre dos vías de comunicación usadas desde el paleolítico, como son Rambla Salada y el Valle del Segura.
Desde la misma se tiene un control visual, por el sur, desde la costa alicantina hasta bien adentrado el valle del Guadalentín, y por el norte, la cuenca de Fortuna, limitada por las Sierras de la Pila, el Carche y Abanilla, que también generan un corredor de este a oeste paralelo al Segura.
Además, la existencia de los grabados rupestres singulares en la Región de Murcia e inéditos hasta fechas recientes, presentes en los cabezos de Mal nombre y La Mina, y a los que estarían asociadas cronológicamente las Cuevas de carácter sepulcral que se extienden por toda la cara sur de la sierra, hacen necesaria también su declaración como Bienes de Interés Cultural.
El tránsito de la Vía Pecuaria denominada 'Vereda de los Cuadros', que desciende desde la Sierra de la Pila y el Cordel de los Valencianos hasta el Coto de los Cuadros, y desde ahí por Rambla Salada pasa a la cara sur de la Sierra de Orihuela, es un motivo más para tal declaración. Se trata de una vía de comunicación ancestral que, dadas las características de los yacimientos, especialmente cuevas y abrigos emplazados en la solana de la sierra, dan prueba del uso de carácter agropecuario de la misma desde la prehistoria hasta nuestros días.
Otro de los motivos asociados a la presencia humana en el tiempo es el valor edafológico. La combinación entre la existencia de vetas cupríferas en la ladera inmediata de la sierra, junto con los fértiles aluviones del valle del Segura, han hecho de la cara sur de la Sierra de Orihuela uno de los lugares más transitados por el ser humano desde el paleolítico medio dentro de los límites municipales de Santomera en la Región de Murcia.
Finalmente hay que considerar que al mismo tiempo que constituye un baluarte patrimonial, la Sierra de Orihuela ha sido afectada por la acción antrópica, hasta el punto de encontrarse en una situación degradante. Es, por tanto, de urgente necesidad la protección integral del espacio propuesto para evitar su pérdida.