MURCIA (EP) La contratación temporal en la Región de Murcia creció un 9,2% en el primer semestre del año, el segundo menor aumento por comunidades solo superior al de Extremadura (8%). Así se desprende del estudio publicado este lunes 19 de julio por la empresa de recursos humanos Randstad, basándose en los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
Cantabria fue la comunidad autónoma donde más ha crecido la contratación temporal en el primer semestre del año en comparación con el mismo periodo de 2020, un 39,4%. Tras Cantabria, los mayores incrementos se registraron en Castilla-La Mancha (27,1%), Baleares (24%) y la Comunidad Valenciana (22,6%).
Por debajo de la media del conjunto del país y con los incrementos menos acusados, se sitúan Asturias (16,5%), Andalucía (13,7%), La Rioja (13,1%), la Región de Murcia (9,2%) y Extremadura (8%). La única caída de la contratación temporal con respecto al año pasado se produjo en Canarias (-3,2%).
En cuanto a volúmenes de contratación temporal, los mayores se registraron en Andalucía (1.992.233), Cataluña (1.046.261), la Comunidad de Madrid (836.471), la Comunidad Valenciana (727.031) y la Región de Murcia (450.031). Dos de cada tres contratos que se firmaron en España en lo que llevamos de año, fue en una de estas comunidades.
A nivel provincial, los mayores incrementos tuvieron lugar en Guadalajara (61%), Castellón (46,6%), Tarragona (35,7%), Soria (32,8%) y Toledo (31,7%), mientras que los aumentos más moderados se registraron en Huesca (0,6%), Lleida (3,7%), Badajoz (5,4%), Jaén (8,4%) y Teruel (10,4%). Por su parte, Tenerife (-5,7%) y Las Palmas (-1%), registraron caídas.
En toda España, el volumen de contratación temporal regresó a niveles previos a la pandemia al firmarse durante el mes de junio un total de 1.625.288 de este tipo de contratos.
De acuerdo con la información del estudio, para encontrar un volumen de contratos temporales superior al registrado durante el pasado mes de junio, es necesario remontarse a 2019.
"Estas cifras son una gran noticia, ya que la contratación temporal es una herramienta fundamental para la creación de contratos indefinidos, además de ser un instrumento útil para responder a las necesidades productivas de nuestro país, un sistema económico muy basado en determinados sectores en los que la temporalidad es imprescindible", ha destacado el director de Relaciones Institucionales de Randstad, Luis Pérez.
No obstante, ha matizado que precisamente por ello, y como se aprecia en la evolución de la contratación temporal, se advierte que un empeoramiento de la situación sanitaria puede traer consigo un impacto negativo tanto en la recuperación económica como en la tendencia de generación de empleo.
En los primeros seis meses del año, se firmaron 7.662.133 contratos temporales, una cifra que, si bien es un 17% superior al mismo periodo del año pasado, es todavía un 22,8% inferior al primer semestre de 2019.
En cuanto a la contratación temporal según cada sector, el estudio destaca que, aunque con respecto al primer semestre de 2020 se experimentaron incrementos en todos ellos, en cuanto a 2019 existen interesantes diferencias.
Así, el sector que más redujo la contratación con respecto a 2019 fue el sector servicios, con una caída del 30%, seguido por la construcción (-13,7%) y la agricultura (-10,2%). Por su parte, la industria experimentó un ligero incremento de dos décimas.
Con respecto al primer semestre del año pasado, y en lo que se refiere a actividades económicas, Randstad destaca que las de información y comunicación (73,7%), educación (54,2%), administración pública (41,3%), suministro energético y eléctrico (39,1%) e industrias manufactureras (31,5%) experimentaron los mayores incrementos.
Por otro lado, los crecimientos más discretos estuvieron protagonizados por la construcción (0,6%), el sector primario (3,9%), la hostelería (4,7%), el sector sanitario (10,5%) y las actividades recreativas y artísticas (10,9%).
Durante el primer semestre de presente año, las actividades que más generaron contratos temporales fueron el sector primario (1.397.781), las industrias manufactureras (970.095), la hostelería (854.400), el comercio (794.770) y las actividades administrativas y auxiliares (678.935), sumando todas ellas un tercio de todos los contratos que se firmaron durante este periodo de tiempo.
En cuanto a la edad de los firmantes de los contratos temporales, Randstad revela que, con respecto al año pasado, el segmento de los menores de 25 años es el que ha incrementado el mayor incremento, un 24,8%.
Le sigue el colectivo más numeroso, el de profesionales entre 25 y 45 años, que registraron un aumento en la contratación temporal del 16,3%, mientras que el segmento que registró el aumento menos acusado fue el de los mayores de 45, con un incremento del 13,5%.