MURCIA. Si quiere ver de cerca e incluso pisar el suelo que había en Murcia en el siglo XII, puede hacerlo. Sólo tiene que visitar la muralla árabe y la puerta de Santa Eulalia, que se ha convertido en un orgullo para el barrio murciano gracias a su 'musealización' con un Centro de Interpretación que se inauguró el 27 de marzo de 2007 tras décadas de estar al aire libre y abandonada.
La licitación la contratación de las obras del proyecto básico y de ejecución de ampliación para la que se han presentado ocho empresas está en su fase final. La Mesa de Contratación municipal estudió esta semana las alegaciones presentadas en trámite de audiencia relativas al expediente. El importe de licitación de este proyecto es de 1.109.646 euros, como informan fuentes municipales.
La ampliación de la llamativa edificación, situada junto a la iglesia y realizado con madera, acero y vidrio, dará más valor al patrimonio del barrio. Han pasado casi 15 años desde que se abrió al público y cada año aumenta el número de visitantes que pasan por el coqueto edificio.
En este enclave y a través de la actividad constructiva desarrollada en los últimos 50 años, se han ido conociendo la existencia de los restos arqueológicos existentes en su subsuelo. Unos han sido excavados y musealizados, otros permanecen enterrados o en el sótano de las edificaciones a la espera de su recuperación y puesta en valor.
El proyecto tiene por objeto la unión y puesta en valor conjunta de todos estos restos (Edificio Almudaina y anexo, Plaza de Santa Eulalia, Centro de Interpretación de la Muralla y solar anexo a éste), mediante la excavación, adecuación y conexión de cinco de esos espacios limítrofes, actualmente independientes, y con contenidos arqueológicos comunes pertenecientes a la historia medieval de Murcia, desde su fundación, en el siglo IX hasta el siglo XV.
Con este proyecto "se podrán convertir estos espacios, ahora inconexos, en un gran centro de interpretación ligado a los elementos defensivos de la ciudad original mediante un discurso continuo y completo. Además, se transformará en un lugar de gran atractivo turístico capaz de incrementar la actividad comercial del barrio y de la ciudad", añaden desde el Consistorio.
Conocida a lo largo de la historia con denominaciones tan dispares como Bab Ibn Ahmad, Puerta del Raval, Puerta de Santa Olalla, Siete Puertas o Puerta de Santa Eulalia, la parte de la muralla de la ciudad de Murcia que estaba en el actual barrio murciano del mismo nombre se levantó en el año 825 d.C., fecha en que se fundó la ciudad. Esta cerca primitiva, construida con tapial de tierra, fue sustituida hacia el siglo XII por una obra más sólida de tapial de hormigón. La nueva muralla estaba reforzada por torreones y por una segunda línea defensiva más baja,denominada 'revellín' o antemuro, frente a la cual corría el foso.
Tras la conquista castellana a mediados del siglo XIII, este complejo sistema defensivo se mantuvo en uso y fue objeto de periódicas reparaciones, como la monumental puerta en recodo que se levantó a comienzos del siglo XV en Santa Eulalia.
El Centro de Visitantes de la Muralla de Santa Eulalia pretende "conservar y transmitir la importancia del legado musulmán de la ciudad, difundir la importancia de la arquitectura defensiva, sobre todo la muralla del siglo XII, mostrar la historia de la ciudad desde el siglo IX hasta el siglo XVIII y promocionar el barrio de Santa Eulalia".