hasta 294 millones
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MÁLAGA (EFE). El ex consejero delegado de Bankia José Sevilla se convertirá finalmente este viernes en el nuevo presidente no ejecutivo de Unicaja Banco en sustitución de Manuel Azuaga, que renunció al cargo el pasado 24 de noviembre tras siete años y medio al frente de la entidad. Fuentes financieras han informado este jueves a EFE de que el consejo de administración lo elegirá entre la terna de aspirantes que ya tenía sobre la mesa y en la que también figuraban del mismo sector bancario la exconsejera independiente de Unicaja Ana Bolado y Antonio Román.
Con la llegada de Sevilla se cierra una etapa de numerosos cambios derivados de la crisis de gobernanza de la entidad y en la que se ha remodelado el máximo órgano de gobierno de Unicaja con sucesivas incorporaciones, incluida su cúpula, e incluso el organigrama a otros niveles, sin olvidar importantes movimientos en el accionariado.
Nombrado en marzo de 2022 consejero independiente de Renta 4 Banco, José Sevilla, como número dos de Bankia durante la presidencia de José Ignacio Goirigolzarri, fue pieza clave en el saneamiento de la entidad y su posterior integración en CaixaBank. El nuevo presidente tenía que ser una persona independiente y externa, según el Banco Central Europeo (BCE), para hacer de contrapeso del consejero delegado, Isidro Rubiales, y ahora se abre un nuevo ciclo. La comisión de nombramientos de Unicaja estudió posibles candidatos a la presidencia, tarea que a su vez encargó externamente a una empresa consultora de Recursos Humanos o 'cazatalentos' (head hunter), y el acuerdo que adopte el consejo se someterá al examen del BCE.
Azuaga, de 76 años, tuvo que lidiar con la guerra interna entre los bloques malagueño y asturiano que se desató tras la fusión con Liberbank en 2021 y ejercía como presidente no ejecutivo después de dejar en septiembre sus funciones ejecutivas según lo previsto en esa integración. Presentó su renuncia como presidente y consejero de Unicaja un año antes de finalizar su mandato, lo que llevó al consejo de administración a activar el plan de sucesión en busca de sustituto. Había planteado que, una vez culminada la fusión con Liberbank y finalizado el periodo transitorio previsto en ese proceso, era el momento idóneo para su relevo en la presidencia y poner fin a la larga carrera en Unicaja Banco.
Azuaga tenía mandato como integrante del consejo de Unicaja hasta 2025, ya que su última reelección como consejero fue en marzo de 2022. Durante estos últimos años se desató la pugna entre los bandos malagueño y asturiano de la entidad, vinculado el primero al sector de la Unicaja original y el segundo el procedente de Liberbank. Estas tensiones derivaron en el cese de Manuel Menéndez, originario de Liberbank, como consejero delegado y el posterior nombramiento de Rubiales como sustituto.
Azuaga accedió a la presidencia de Unicaja en junio de 2016 tras dejar el cargo, después de 25 años, el histórico Braulio Medel y ejercía como presidente no ejecutivo, de acuerdo con lo previsto en la fusión con Liberbank, que fijaba un traspaso de poder por el que debía desprenderse -antes del 30 de julio- de esas tareas, que pasaron al consejero delegado.
Este banco de origen malagueño vivió en los últimos meses importantes cambios en el capital, caso del empresario Tomás Olivo, sexto español más rico según la revista Forbes, que ganó peso en Unicaja al convertirse en el segundo mayor accionista de la entidad, superando el 9 %. La Fundación Bancaria Unicaja posee la mayor participación en Unicaja Banco, con un 30,24 %, y en tercer lugar se sitúa Indumenta Pueri (de la familia propietaria del grupo textil malagueño Mayoral), con un 8,54 %.