CARTAGENA. Iván Calero, jugador del Fútbol Club Cartagena titular indiscutible por la banda derecha y que fue clave en la consecución de la permanencia en LaLiga Hypermotion, reconoció este jueves que haber alcanzado el obejetivo fue "una explosión de alegría inmensa" y calificó de "números tremendos" los registrados en una segunda vuelta de la competición en la que es el mejor equipo de Segunda División con 36 puntos sumados en 18 jornadas.
El madrileño, lateral derecho y también extremo y hasta lateral zurdo, hizo esas declaraciones tras el entrenamiento llevado a cabo por la plantilla que dirige Julián Calero, su padre, en la ciudad deportiva José María Ferrer de La Manga Club, donde el cuadro blanquinegro siguió preparando su próximo encuentro, que será el domingo a las dos de la tarde en Ipurúa ante la Sociedad Deportiva Éibar.
A ese choque, de la cuadragésima jornada del campeonato, la antepenúltima, llegará el Efesé ya salvado matemáticamente con 51 puntos y una racha abierta de cuatro triunfos seguidos, su mejor dinámiica del curso, y además sin encajar ningún tanto en esos compromisos.
El Cartagena, que selló su salvación venciendo por 2-0 al Club Deportivo Tenerife el pasado domingo en el estadio Cartagonova, obtuvo un objetivo que parecía quimérico pues terminó la primera vuelta con sólo 15 puntos en 21 encuentros disputados.
"Las sensaciones hoy son muy buenas en un año que fue muy difícl con muchas emociones amculadas y una primera vuelta muy dura en cuanto a resultados y emociones. Culminar de esta forma fue una explosión de alegría inmesa pues logramos un objetivo que estaba tan complicado y lo logramos a falta de tres jornadas para la conclusión", destacó Iván Calero.
"Estamos muy contentos y satisfechos y ahora se trata de acabar de la mejor manera sabiendo que jugamos ante dos rivales como el Éibar y el Espanyol que están peleando por subir y otro como el Huesca que tal vez esté luchando por la permanencia. No nos debemos permitir ninguna relajación", añadió el de Parla, de 29 años y que cumple su segunda temporada en el Efesé, al que llegó en el verano de 2022 procedente de la Agrupación Deportiva Alcorcón.
El zaguero blanquinegro no ocultó que hicieron cálculos y que se cumplieron los más optimistas. "Todo el mundo hizo cuentas a partir de enero y obtuvimos unos números tremendos. Es el premio y la recompensa a todo el trabajo hecho incluso en esa primera vuelta en la que no salieron las cosas", comentó.
Después de verse tan abajo, siendo colista durante la mayor parte del campeonato, el equipo reaccionó y de qué manera. Para Iván hubo un momento que resultó trascendental aunque aquel partido se perdió por 1-2 en la prórroga.
"El punto de inflexión fue el partido de la Copa del Rey contra el Valencia pues nos dimos cuenta de que si éramos capaces de competir contra un rival de ese nivel, que es de Primera División, podíamos hacerlo contra todos los de nuestra catgegoría y a partir de ahí fuimos sumando. Sabíamos que no nos podíamos permitir muchas derrotas, nos apretamos los machos y tiramos todos por el mismo camino para conseguir algo increíble", explicó el futbolista, quien participó en 34 de los 39 partidos ligueros, siendo titular en 33 de ellos, y marcó un gol. En la Copa del Rey intervino en otros tres encuentros, uno desde el principio.
"Me encontré bien y estable y eso, ayudar al grupo en el día a día y dentro del campo, te hace sentir satisfecho y partícipe de lo logrado", dijo al referirse a su temporada a título particular.